domingo, 30 de septiembre de 2012

El Museo de Santa Cruz (Toledo)


Es como casi todos los museos españoles, de titularidad del Ministerio de Cultura,  pero está gestionado por la Conserjería de Cultura de la Comunidad de Castilla-La Mancha. En este caso, está clara la responsabilidad de la brillante gestión: confluyen las prerrogativas de tirios y troyanos, en "el interés por la cultura".
He conocido el Museo de Santa Cruz en mejores tiempos, cuando constaba de dos plantas y subterráneo visitable... Con el paso de los años, tras varias exposiciones de gran proyección política y social, ha recuperado su origen primigenio de viejo hospital semiabandonado. No es posible ver la antigua sección de arqueología y de las dos plantas "principales", una está vacía, a la espera de la próxima exposición... Lo mejor cuidado es el jardín... como si quienes deciden sobre su funcionamiento en las altas instancias pretendieran seguir manteniendo en buenas condiciones el marco fotográfico. Me pregunto si para "los políticos" estas instituciones serán algo más que decorados convenientes para hacer ampulosas declaraciones de apoyo a la cultura.


En la actualidad y dentro de "la programación de primavera", hay una exposición en una de las salas bajas del claustro: "El arte del Siglo XX en los Fondos del Museo de Santa Cruz. Del Impresionismo al Surrealismo". En ella posemos ver obras del hoy cerrado Museo de Arte Contemporáneo de Toledo, que estuvo en la Casa de las Cadenas desde 1975 y que hoy permanece "cerrado por obras" indefinidamente.  En el cartel, al que se le empiezan a caer las letras, advierten que "Esta primera exposición se completará con una segunda muestra expositiva que dará a conocer el panorama de las segundas vanguardias hasta desembocar en la postmodernidad".
La colección permanente, dispuesta en la planta alta —acaso la menos afectada por las humedades—, han resuelto carencias de la instalación precedente y ya se pueden ver en orden cronológico y condiciones de iluminación efectistas pero manifiestamente mejorables, las fases  históricas más importantes de la "región toledana", mediante una selección excesivamente radical de piezas. Hace tres o cuatro años, si no recuerdo mal, no era posible contemplar las piezas medievales ni el resto de los objetos arqueológicos, exceptuando unos pocos distribuidos caprichosamente por el patio.
Lo más interesante  del museo: la espléndida colección de humedades y eflorescencias salinas.

El Museo de Santa Cruz posee un anexo en la iglesia de San Román, donde está el Museo de loa Concilios y de la Cultura Visigoda...  Sugiero al lector que acuda a visitarlo por dos razones:
1. Porque contiene uno de los mejores muestrarios de cartelas escritas con máquina de escribir antigua que existen en el mundo. Por desgracia, las condiciones de conservación son tales que es difícil averiguar si fueron realizadas con Olivetti, Erika  o Underwood.


2. Porque es un magnífico ejemplo del sentido inflacionista con el que aún se contempla la "cultura visigoda". Es obvio que los visigodos contaban con un ajuar personal característico, pero... ¿se puede hablar de arquitectura visigoda? Insisto en lo de Velázquez como "pintor austriaco". La voluntad por inflar ese componente de nuestras raíces culturales es tal, que se aplica la etiqueta a obras de cronología muy dudosa.  El conjunto de relieves ofrecido por el Museo de los Concilios es demasiado heterogéneo para adjudicarlo a una fase cultural tan inestable, sobre todo, teniendo en cuenta que Toledo fue una importante ciudad romana que ofrece escasos restos atribuidos a esa época. Hace años, Joaquín Yarza se preguntaba dónde estaba la "gran arquitectura" visigoda, que diera réplica urbana a las obras rurales, supuestamente repartidas por Castilla, y que proporcionara fundamento material a la celebración de los Concilios de Toledo. Los arqueólogos lo han tenido claro: cualquier relieve con elementos ornamentales derivados de las formas helenísticas, pero evolucionados, "tenía que ser visigodo". Yo me pregunto dónde está la gran arquitectura romana que debería corresponder a una ciudad que tuvo un circo con capacidad para más de 20.000 personas.

¿"Capitel visigodo"?
Mientras algunos de los museos más importantes de Toledo padecen penuria —también está "cerrado por obras" el Taller del Moro—,  hace dos años se inauguraba el Museo del Ejército, "justificado" por voluntad de cierto manchego ilustre aficionado a los crecepelos y porque se pretendía "reconstruir" el Salón de Reinos, donde se alojaba la antigua colección de efectos militares...
Hoy se ha olvidado la reconstrucción del Salón de Reinos, pero se puede ver el perfil imponente y reforzado del alcázar desde las ventanas del Museo de Santa Cruz... Otra metáfora recurrente.


El Centro Centro

Fuimos a dar un paseo ayer... aprovechando que en la Fundación Mpfre nos daban hora retrasada para ver la exposición del Pompidou...
Los gestores del antiguo Palacio de Correos ofrecen varias exposiciones de entidad diversa. La mejor es, a mi juicio, la instalación de cubos para recoger goteras... Ofrece espléndida metáfora recurrente sobre los recursos públicos dedicados a "cultura" en tiempos de crisis. Insuperable.




Lo más homologable entre iniciativas más o menos discutibles —por supuesto, según mi criterio—  es la exposición "El artista en la ciudad", comisariada por José María Parreño, que reúne pinturas relativamente recientes, de ámbitos estéticos diversos, centradas en el componente urbano de la cultura actual. No todas tienen la misma calidad, pero sí están por encima de cierta calidad.


viernes, 28 de septiembre de 2012

El Museo de Segovia


Estuvo cerrado durante 20 años, en su emplazamiento anterior, hasta que se inauguró en 2006 en su emplazamiento actual, en un lugar envidiable, pero marginal a los itinerarios turísticos que, por lo general, siguen turistas y visitantes eventuales; ello ayudaría a explicar su baja cifra de visitantes (17.334 durante 2011).
Ocupa el antiguo matadero judío, que fue rehabilitado según un proyecto que pone sobre la mesa, de nuevo, el problema de cómo conciliar las necesidades museísticas con las derivadas de una rehabilitación arquitectónica. En este caso, desde la experiencia propia, las sensaciones son buenas... con pocas salvedades: no me gusta la fachada ni el acceso y creo que la iluminación se podría mejorar.
No proporcionan el habitual tríptico, sino una fotocopia en blanco y negro... Así, pues, es fácil deducir el tratamiento recibido desde el poder político. No quiero ni imaginar lo que sucederá al año próximo.
Las cartelas son bastante completas y, como de costumbre, los vigilantes, muy cordiales.


Capitel de Duratón. La cartela dice:

"Capitel de pilastra de estilo corintio. Caliza. Duratón. Poco puede señalarse en cuanto a las construcciones de la antigua población de Duratón, puesto que casi nada se ha avanzado desde que Juan de Villanueva excavara, en 1795, unas posibles termas. El capitel de pilastra que exponemos ejemplifica la riqueza arquitectónica de alguna de las principales edificaciones de la ciudad. Es posible que pertenezcan al mismo edificio un segundo capitel, similar, y varios fragmentos de columnas acanaladas reutilizadas como material constructivo en un edificio del pueblo de Duratón y ubicados actualmente, a modo de monumento, en un jardín de la cercana ciudad de Perorrubio".  

No es de "estilo corintio", sino de "orden corintio", al menos mientras se mantenga la terminología al uso. Guarda mucha relación con otros capiteles aparecidos en tierras castellanas. La ornamentación tapizante es comparable a la de los de Clunia, que M.A. Gurtiérrez Behemerid  sitúa en la primera mitad del siglo I. Los capiteles de estas cualidades, aparecidos en áreas relativamente marginales (alejadas de los grandes núcleos urbanos), pudieron ser realizados por tallistas de escasa habilidad, en momentos difíciles de precisar. Como no creo en la posibilidad de sistematizar su realización con excesiva precisión, los situaría entre los siglos I y II, d.C.

Capitel de Riaguas de San Bartolomé. La cartela:

"Capitel de columna. s. III d.C. Mármol. Riaguas de San Bartolomé. De entre lo poco que se conoce de estas villae romanas en la provincia, destaca este capitel. Tuvo que pertenecer a un edificio de notables proporciones con columnas y otros capiteles. También allí hay noticias de mosaicos".


El capitel es de factura tosca pero mantiene la estructura del orden salvo en la carencia (o extrema simplificación) del tallo que une el florón (en el ábaco) a la formación vegetal de la que debe surgir. Estas simplificaciones son frecuentes, precisamente, a partir del siglo III, cuando en todo el Imperio se dejan sentir los influjos orientales, que no se advierten en esta pieza. Sin embargo, también tiene elementos que inducen cronología anterior: la profundidad de la talla, el tipo de acanto,  el labio del Kálathos y, sobre todo, la proximidad con las serie de Clunia. Lo más probable es que este capitel fuera realizado antes del siglo III por un taller de escasa habilidad; una cronología "de compromiso" le situaría entre los siglos II y III.


Las piezas de Constanza (?) (Bernardos). La cartela:

"Estas dos piezas de época visigoda, impostas de pilastras o salmeres sobre los que descansaba un arco, han podido pertenecer a a un mismo vano. Una es original de caliza y la otra, un vaciado de yeso encargado por A. Molinero. Deben proceder de Constanza (Bernardos) y cabría fecharlas en la segunda mitad del siglo VII. Presentan animales simbólicos, cruces de tipo visigodo (patadas) y la misma inscripción, que interpretamos como dedicatoria de las pieza, o del edificio en el que estuviesen: ¡Manes y Liuva, en nombre de Dios' (MANES DOMINI/ ET AELIVVE)"


La ornamentación es afín  a la de las primeras lápidas cristianas de la península Ibérica. Por las razones ofrecidas en varias ocasiones, se debería ampliar la banda de adjudicación. En este caso, la aparición de la cruz patada estrecha el marco de atribución hasta la primera mitad del siglo VI, cuando este elemento se emplea en las lápidas sepulcrales con frecuencia. ¿Época visigoda? Si dijéramos que Velázquez fue un pintor "de época austriaca"...

Los capiteles de Aguilafuente y Domingo García están agrupados en la cartela:

"Sobre los restos de la villa de Santa Lucía, se localizó este interesante capitel de tipo corintio, de caliza marmórea. Revela la desaparición de algún edificio de época visigoda, quizá de carácter religioso, asociado a los enterramientos de aquel lugar. El otro fragmento de capitel, quizás procedente de la ermita de San Isidro, en Domingo Garcí, presenta un carácter marcadamente tardorromano, que hemos de poner en relación con otros ejemplares del entorno emeritense. Ambos casos revelan el tránsito estilístico entre el mundo clásico, ya tardorromano, y el altomedieval".

Entiendo que se deberían ofrecer separados porque son piezas de cualidades diferentes y que se deberían incluir algunas precisiones:


a) El capitel de Aguilafuente no es "de tipo corintio", sino "corintizante", puesto que no contiene todos los elementos del orden: carece de caulículos, de volutas y la interpretación del florón es sumamente estilizada; las hojas de acanto ofrecen modo sumario, con "digitaciones" que definen anulaciones perfectamente circulares. Podría clasificarse entre los siglos IV y VI, aunque con más probabilidades de ser obra temprana, si tenemos en cuenta la fuerte curvatura de los brazos del ábaco (no he podido apreciar trazas, pero podría haberlas), que acredita pervivencia de fórmulas romanas.


b) El fragmento de Domingo Garci proporciona pocos datos para su evaluación. La existencia de caulículos, según fórmula convencional, refuerza su vinculación con las tradiciones romanas y con el orden corintio, pero los acantos ofrecen fórmula comparable a la del capitel de Aguilafuente. Es menos evolucionado que el anterior, aunque la banda de atribución podría ser la misma: siglos IV al VI.

El IVA y las galerías de arte contemporáneo


Hoyesarte publica que...

"La Asociación de Galerías de Arte Contemporáneo Art Barcelona ha realizado una acción de protesta y lectura de un manifiesto contra la subida del IVA en el sector de la cultura coincidiendo con la presentación de la nueva temporada. En el acto participaron los galeristas y los artistas que exponen en la nueva temporada. En referencia al Decreto Ley 20/2012, de 13 Julio, por el que se modifica el IVA, Art Barcelona (ABE) pone de manifiesto lo siguiente:
- El IVA de las galerías de arte aumenta del 18 al 21%.
- La creación, base del trabajo de las galerías, pasa de un gravamen del 8% al 21%.
- Finalmente, esto afecta al cliente que debe hacer frente a un incremento del precio de la obra de un mínimo del 7%.
Las consecuencias de esta subida son graves e inmediatas:
• España ve afectada su capacidad de exportar e importar arte contemporáneo, al convertirse en un mercado poco competitivo respecto a otros países.
• Se fuerza a la creación española a iniciar un éxodo hacia mercados internacionales más ventajosos y se imposibilita la entrada de artistas extranjeros en el mercado español.
• Se destruye un sector estratégico, generando unas consecuencias negativas muy superiores al beneficio recaudatorio que se persigue.
• En un tiempo récord, el nuevo IVA conseguirá frenar el desarrollo y la difusión del arte contemporáneo y mermar el potencial artístico del país, que ha costado décadas construir.
• El resultado final será un mercado extremadamente debilitado, con una disminución de la actividad que se estima en alrededor del 60% desde que comenzó la crisis, y puede suponer el cierre de más de un 20% de las galerías.
Un país que grava la creación, hipoteca su cultura, su futuro, su inteligencia y la calidad de su convivencia. Por estos motivos, la asociación de galerías Art Barcelona:
- Exige al Gobierno de España que modifique la nueva ley del IVA respecto al mundo del arte y de la cultura
- Solicita el apoyo activo del Govern de la Generalitat de Catalunya a esta reclamación.
- Llama a las entidades españolas que agrupan a artistas y galerías, así como a los demás actores del mundo del arte, (museos, fundaciones, coleccionistas, críticos de arte y universidades), a realizar una acción conjunta para conseguir la modificación de una ley que nos deja en una situación de total desamparo.

Todos los sectores "culturales" han reaccionado en términos parecidos por razones obvias: el PP, en sus diferentes nombres, lleva ochenta años de espaldas a la creación, con excepciones fáciles de evaluar desde los tiempos de Pemán. El conservadurismo es, por su propia esencia, contrario a la innovación y, por lo general, la innovación es un componente esencial de la Creación.
Pero mucho me temo que, en este caso, la Asociación de Galerías de Arte Contemporáneo Art Barcelona juega a lo mismo que la ministra Sinde cuando lanzó la ley que lleva su nombre, al ofrecer a la sociedad una imagen distorsionada para defender intereses poco relacionados con la "creación". En un sector (en España) donde "los precios" no dependen del equilibrio entre oferta y demanda y se ponen según parámetros muy "dudosos" —por no decir aleatorios—, es absurdo quejarse de un incremento fácil de absorber "retocando" mínimamente lo que percibe el autor y, por supuesto, lo que percibe el galerista.
En ese sentido, es infinitamente más perniciosa la pérdida de poder adquisitivo de las clases medias, que hasta ahora componían un objetivo comercial secundario de las galerías, detrás de las instituciones (públicas y privadas) y los grandes coleccionistas.
Tal y como están las cosas, sospecho que el incremento del IVA afectará casi exclusivamente a los sectores que más han "trabajado" para jodernos a todos. El arte que venden las galerías lleva implícitas ciertas contradicciones en su implementación social (joder, qué poco me gusta esa palabra, ¡pero está de moda!).
Ahora bien, si se trata de un posicionamiento frente al gobierno de Rajoy, el manifiesto tendría mucho sentido, porque tal y como se anunció ayer, el Presupuesto del año próximo supone ruina prácticamente absoluta de los sectores culturales financiados con dinero público.

La Fundación Andy Warhol vende sus obras: El arte se convierte en dinero


Según recogía El País:

"Desde que se constituyó la Fundación en 1987, siempre hemos vendido obras de Warhol para destinar el importe a nuestro programa de becas. Ahora hemos decidido sacar el resto de la colección al mercado para incrementar nuestra ayuda ante los recortes presupuestarios de la Administración a la cultura y el descenso de financiación privada a las instituciones de arte durante la recesión”, explica por teléfono Joel Wachs, el presidente de la Fundación."

El proceso contará con la ayuda Christie's para recaudar 100 millones de dólares, mediante la venta de 20.000 piezas.


Problemas:
1. Quienes han adquirido recientemente obras de Warhol están acongojados imaginando que al subir la oferta es probable la caída de los precios. Algunos galeristas creen, incluso, que esa caída puede arrastrar a todo el mercado del arte contemporáneo, en situación inestable durante los años de la crisis.
2. Si una Fundación de este tipo se desprende de las obras del artista... ¿en qué situación queda?; ¿como entidad financiera filantrópica?

Seguramente, los gestores de la Fundación Andy Warhol tienen muy buenas intenciones, pero me silban los oídos, porque esta iniciativa acentúa la ecuación nefanda que iguala el "arte" con el dinero. Pero tenga cuidado el lector ingenuo, porque ese "arte" no es "el arte", sino "el arte contrastado" en los circuitos comerciales más poderosos, aquellos legitimados por la infraestructura financiera que los sustenta. Por suerte o por desgracia, las instituciones estéticas especializadas cada vez dependen más de ellas... Y francamente no sé si quienes las dirigen obran ingenuamente o no.

jueves, 27 de septiembre de 2012

El Museo de Ávila


Fue inaugurado en el año 1971 y se diría que ha cambiado poco desde entonces. Forma grupo con museos como el de Cáceres o el Valladolid; como ellos, quedó al margen de la generosidad presupuestaria de los "buenos tiempos" y es previsible que entre en simas oscuras por muchos años... Está organizado en dos conjuntos: la Casa de los Deanes, con estructura de museo convencional, y la iglesia de Santo Tomé, que es una especie de almacén abierto al público desde el año 1998. Lo visitan casi 30.000 personas al año.


Las vitrinas son como las de Soria, demasiado "convencionales"; también es mejorable el sistema de iluminación y, por supuesto, la climatización.
Frente a lo que sucede en el museo de Burgos, en éste hay muchos paneles explicativos y algunos con textos demasiado pedagógicos, pero discutibles en ciertos detalles.  El dedicado al Islam, colocado detrás de tres candiles, dice: 
"El Islam sirvió de vehículo de propagación de la cultura musulmana dejando una huella profunda en la Península, durante su estancia de casi ocho siglos, que aún hoy perdura, no sólo en los rasgos lingüísticos sino también en los modos de vida.
Mahoma (570?-632), designado como enviado de Alá, unificó por medio de una nueva concepción religiosa recogida en el Corán, parte del mundo árabe, al que imprimió un nuevo modo de vida. Posteriormente el deseo de propagar esa religión, que era tolerante con las demás, originó una rápida expansión a través de la denominada Guerra Santa, que, entre otros fines, servía de camino al Paraíso. Su avance por los territorios del Sur del Mediterráneo impuso un cambio radical a los pueblos conquistados, principalmente en el aspecto cultural"
Creo que sería fácil mejorarlo, tanto en la forma como en algunos aspectos del "fondo", sólo teniendo en cuenta que el término "islámico" alude a los aspectos culturales y el término "musulmán" (sometido), a las personas.  Algo parecido sucede con el panel dedicado a "lo mudéjar"...

Entre las piezas más interesante —siempre desde mis preocupaciones "obsesivas"— debo citar varios fragmentos  descontextualizados, el jarro de Balbarda y una pieza rota, aparecida en los alrededores de la iglesia de San Pedro.
Entre los fragmentos existe un capitelillo, probablemente de ventana, procedente de El Raso (Candeleda), un fragmento de cruz laureada (probablemente), un cimacio con cruces y otras piezas de reducidas dimensiones. La descontextualización impone prudencia en su clasificación...





El jarro de Balbarda me parece pieza muy interesante y sorprendente, por la inclusión de varias representaciones animadas; una de ellas (figura 10 del calco) se ha interpretado como un "emperador con cetro y lictor" y como "el arcángel con la cruz y la lanza con las dos esponjas (de hiel y vinagre)" . Existe cierta relación con los repertorios ornamentales de los objetos califales de lujo (bronces, marfiles, etc,).  El debate que la rodea es, en cierto modo, razonable, aunque no me parece oportuna la adscripción a “tiempos visigodos”; es mucho más probable que sea de los alrededores del siglo X, por la vinculación con la iconografía de las miniaturas mozárabes. Desde ese punto de vista, el jarro de Balbarda aparecería como paradigma de arte mozárabe (sin comillas). Por desgracia para los partidarios de inflar esa categoría, la aparición fuera de contexto abre otras posibilidades y, entre ellas, la realización tardía, por ejemplo, en tiempos románicos o, incluso, posteriores, sin olvidar la hipotética adscripción a la corte califal. Lo más probable: que fuera realizada a partir del siglo X… sin mayores precisiones, mientras no existan referencias conocidas más claras.



La placa fragmentada posee una crátera, dos delfines y, muy probablemente, un crismón. La han clasificado como "placa paleocristiana, siglo IV/V" y aunque subscribo la cronología, no sé si es correcto hablar de "arte paleocristiano" en este caso...

miércoles, 26 de septiembre de 2012

25-S: Bananas


Corrupción, estupidez, mangoneo, inoperancia, privilegios, incapacidad, ambición, fanatismo, codicia, ilegitimidad... Todo legal.
¿Protesta la gente? Si la protesta es pacífica y sus pretensiones no molestan demasiado... no hay problema. Lo decía Franco cuando Tàpies y los de El Paso hacían "arte revolucionario": "Que hagan todas las revoluciones que quieran". Pero si la protesta es incómoda, aunque pacífica,  la cosa cambia. La solución también se le ocurrió a Franco:  se dan las instrucciones oportunas a los funcionarios de policía —a los de uniforme y a los de capucha— y, de inmediato, la manifestación se convierte en "extremadamente violenta" y, por consiguiente, en ilegal... Y se reintegra de inmediato el imperio de la ley... a hostias.
Lo malo para quienes funcionan con esos parámetros es que en la actualidad —en un mundo globalizado— no sólo deben preocuparse de la imagen ofrecida a sus votantes, a las "mayorías silenciosas" propias; ahora también hay que cuidar lo que reciben otras personas, no sólo en España...  Por suerte o por desgracia, los periodistas de The New York Times, The Guardian, The Financial Times, Le Monde, La Repubblica, etc. no son votantes del PP y enseguida perciben el intríngulis del quehacer político cotidiano: ahí está, por ejemplo, la genialidad estratégica de la señora Cifuentes, tan inteligente ella, exponiendo juicios impecablemente "sensatos". "¡Menuda tropa!"
Tal y como reflejan con frecuencia los medios no españoles y los no apesebrados, la imagen global que están percibiendo los observadores más o menos "independientes" —incluso, aunque sean de orientación liberal— deja a nuestros gobernantes compitiendo por ver quién consigue el record mundial de torpeza.  Zapatero dejó el listón muy alto, pero Rajoy lo va a superar con creces...

"Meanwhile, in his heroic denials that a bailout is even necessary, Spanish prime minister Mariano Rajoy increasingly resembles Saddam Hussein's information minister continuing to insist the Americans were fleeing and killing themselves by the hundreds at the city's gates, even as Baghdad was falling. Rajoy's strategy of denial has form. In June he insisted Spanish banks would not need to be bailed out, two weeks before they were. This paternalistic, old-fashioned attempt to mould public opinion in the face of reality seems to indicate that, as many local commentators have observed, the Spanish administration is operating "as if it didn't know the internet existed".


En estas circunstancias, complicadas progresivamente por el "golpe de estado económico" que se avecina, me pregunto cómo pretenderán resolver el problema de Cataluña y el País Vasco... Me dice un amigo que a Francia y Alemania le vendría bien tratar con Catalunya y País Vasco, mejor que con un Estado español arruinado... Me pregunto también si el señor Rajoy y sus socios de otros partidos habrán considerado la posibilidad de perder el apoyo de Francia y Alemania en el contencioso con "las regiones separatistas" y quedar con el culo al aire ante las autoridades monetarias y financieras europeas. No me extrañaría que, a estas horas, los asesores del señor Mas y del PNV ya hubieran conseguido el compromiso verbal de "neutralidad" política ante el enfrentamiento con el estado Español, siempre y cuando el proceso sea democrático y pacífico...
¿Estarán pensando los genios estrategas del PP en hacer lo mismo que hicieron ayer en Neptuno? Si el proceso "secesionista" es pacífico, se envían unos cuantos carros de combate y en cuanto sea "extremadamente violento", se lanzan misiles...
Ahora que estamos a punto de una intervención salvaje, parece difícil que algún dignatario europeo sacrifique la imagen ante sus electores por apoyar a un presidente pretendidamente hábil en cambiar el nombre de las cosas, como el Ministro de Información de Sadam Husein, pero incapaz de defender el interés de sus conciudadanos. "¡Menuda tropa!"

Lo tenemos crudo.

martes, 25 de septiembre de 2012

El museo de Palencia

Es el museo castellano-leonés que, según los datos oficiales, recibe menos visitantes al año (entre el grupo de los antiguos provinciales). Ocupa el espacio de La Casa del Cordón, obra del siglo XVI, que llegó al XX con la fachada y poco más. Es decir, no se trata de un museo ubicado en un espacio arquitectónico reutilizado, aunque de la lectura de algunas indicaciones "oficiales" se deduzca lo contrario. Así, pues, forma conjunto con el de Zamora.
Sobre el solar, Luis Arranz Algueró propuso un proyecto culminado en 1997. En la "hoja informativa" ofrecida al visitante han escrito: "El proyecto arquitectónico, realizado por Luis Arranz Algueró, solucionó el difícil compromiso de ensamblar la antigua y la nueva arquitectura, sin restar protagonismo a La Casa del Cordón y sin introducir elementos de distorsión en el entorno urbano".  Dicho así, queda lisonjero, pero poco preciso. Es fácil explicarlo de manera más cabal y descriptiva... El proyecto de Luis Arranz consistió en construir un edificio singular sobre el solar de La Casa del Cordón, manteniendo la fachada del siglo XVI y algunos otros pocos elementos sueltos. El panel que da la bienvenida al visitante insiste con un título engañoso: "RESTAURACIÓN DE LA CASA DEL CORDÓN PARA MUSEO ARQUEOLÓGICO". Sin embargo, según se explica en los paneles, no había posibilidades de proceder a la restauración del viejo edificio y la solución ofrecida fue mucho más imaginativa y, a mi juicio, la más sensata en el sentido básico, con independencia del juicio que nos merezca el resultado final. El proyecto de Luis Arranz se unía a una de las corrientes arquitectónicas más consolidadas en España, desde Torres Blancas. En la Universidad Complutense, sin ir muy lejos, hay unos cuantos ejemplos realizados en los alrededores de 1970.


El edificio de Arranz Algueró, concebido a partir de un "patio de luces" cupulado, que hace pensar en el Reichstag,  es muy vistoso, aunque no estoy seguro de que esa vistosidad sintonice bien con las necesidades de un museo. Mientras lo recorría, "inevitablemente", recordé la reutilización "maliciosa" que hizo Stanley Kubrick en La naranja mecánica del "brutalismo", al convertir el proyecto de Richard Sheppard para la universidad de Brunel (años sesenta) en el "ambiente opresivo" definido por el paso desde la cárcel al Centro Ludovico. Seguramente algún cineasta utilice el museo de Palencia para rodar una secuencia de acción...
Además de la cúpula, destaca una escalera "suspendida", de indudables cualidades visuales... Pero seguramente, lo más elogiable sea el protagonismo de la luz y la articulación espacial que ello supone en áreas de claridad escalonada que, a su vez, permite establecer criterios de prioridad para la exhibición de las colecciones.

El hormigón visto ofrece texturas interesantes desde el punto de vista estético, pero acaso ese interés derive hacia los componentes expresivos y éstos suelen implicar connotaciones inquietantes. Desde esa perspectiva, creo que no fue buena idea la elección del proyecto, contando, incluso, con su calidad arquitectónica, entendida ésta en términos no funcionales —si es que ello es posible. También en esta línea, España tiene una tradición consolidada, al menos, desde cuando Moneo diseñó el museo de Mérida, paradigma de disociación entre "forma" y función. Sí, ya sé que algunos malévolos dicen que esa circunstancia es anomalía, indicio de "mala arquitectura", pero en los ambientes institucionales españoles siguen apostando por el imperio de la "gloriosa forma", que nos comunica con el "Logos"...
Ignoro los debates que pudieron acontecer mientras se tramitaba el proyecto, pero es fácil imaginar la "situación general", porque en la sociedad española de aquellos años —y aún ahora— tenía mucho más "peso" el juicio arquitectónico que el juicio museístico. Y en este caso, aquel contaba con un factor adicional de cierto interés.




Frente a las tradiciones hispanas, polarizadas por el dudoso gusto del edificio Villanueva, como modelo museístico de calidad, cuando se pusieron en marcha las obras del palentino, ya se había inaugurado el Guggenheim-Bilbao y con él se habían abierto camino ideas nuevas, entre ellas, la del museo-hito, como recurso retórico de primera magnitud: la afluencia al museo será mayor si el edificio es singular, si posee gran interés estético, pero sobre todo, si atrae la atención y el interés de "la gente". En ese sentido, recuperar el "brutalismo", a finales del siglo XX,  para cargar los efectos plásticos del hormigón visto en el interior de un museo, contando con el "problema" de La Casa del Cordón, podría tener sentido... incluso aunque desencadenara juicios contradictorios. Por desgracia, los resultados en ese sentido no han podido ser más negativos, quizás porque para que los valores estéticos de un museo sean atractivos, deben contar con una espectacularidad que aquí sólo está en el interior, como en los edificios nazaríes. Supongo que la reducida cifra de visitantes no está causada sólo por el proyecto de Arranz Algueró; algo tendrán que ver también las cualidades turísticas de Palencia y sobre todo, la escasa capacidad de motivación de los museos sin obras de gran proyección popular y el aún más escaso apoyo de las instituciones.




Por desgracia, no se cuidó demasiado la ejecución del edificio y se malograron algunas cualidades del proyecto. Existen demasiados detalles de impericia constructiva. En un paseo rápido se advierten "juntas de hormigonado" chapuceras, coqueras incompatibles con los más relajados criterios de calidad constructiva, molduras del encofrado mal puestas, escapes de lechada, etc, etc, Desde esa constatación, con un poco de humor de avispa —colocando la gracia en el culo—, se pudiera hablar de "brutalismo posmoderno"...

La instalación museística aparente es mejor que en otras instituciones de la misma región, aunque tiene en común con ellas algunos inconvenientes, como las comunicaciones verticales, concebidas como curso penitencial, mediante escaleras no tan severas como las de otros museos "hermanos". Tienen ascensor de uso restringido para personas incapacitadas.
La iluminación es buena y los paneles explicativos están bien concebidos. Me ha parecido interesante la idea del "almacén visitable", que, en este caso, ofrece vitrinas sobrecargadas de piezas, como de museo antiguo;  no sé si se podría poner en práctica en instituciones con fondos más abundantes.
Las personas que atienden al público también aquí son muy amables; en especial, nos sorprendió gratamente un vigilante de seguridad, que respondió a nuestras preguntas con solicitud y buenos argumentos.

La pieza más importante del museo es, a mi juicio, el mosaico de Villa Possidica (Dueñas), fechado en el siglo IV. El museo no contiene muchas piezas de interés excepcional, pero sí algunas especialmente relevantes para las cuestiones que me ocupan desde hace años:


Entre las estelas, que ofrecen repertorios iconográficos interesantes para situar el origen de ciertas fórmulas altomedievales, destaca la de Licinius Carisianus, clasificada en el siglo III d.C., que también ilustra sobre el uso del arco de herradura en Hispania desde época temprana. Sus cualidades "contrastan" con los usos derivados del magisterio de Gómez Moreno, para quien el arco de herradura es "fósil guía" de "lo visigodo", de lo hispanoislámico o de "lo mozárabe", según sea su aspecto. Sin embargo, desde los datos conocidos, la costumbre de incluir arcos de herradura también está documentada en lápidas sepulcrales cristianas del occidente peninsular; una de ella, aparecida en Mértola, está fechada en el año 525. Entiendo que son testimonio de la existencia de templos realizados antes de comienzos del siglo VI con esa peculiaridad, cuando menos,  en el oeste de la Tarraconensis, el este de Gallaecia y la Lusitania.

Los capiteles romanos aparecidos en Palencia (calle de Santo Domingo de Guzmán), atribuidos a la segunda mitad del siglo I, ofrecen cualidades próximas a los de Clunia. Como ellos presentan elementos ornamentales que suponen "barroquización" de las fórmulas habituales en Roma.  De hecho, ofrecen soluciones formales que recuerdan a las modalidades tapizantes que muy probablemente sirvieron de referencia a las fórmulas califales.


También aquí continúan clasificando como "mozárabe, s. X", a los capiteles del "taller bizantino".  El de Sahagún de Campos se aproxima a otras piezas de Sahagún y, por lo tanto, podríamos relacionarlo con los que parecen más próximos a los modelos bizantinos: las  hojas de acanto están construidas mediante series de foliolos lanceoladas triples y anulación de trépano sobre la más corta, realizado mediante cabeza cónica. El "cesto" es troncocónico, frente a la costumbre cordobesa de emplear forma cilíndrica. Carece de florón central y el conjunto de volutas-cáliz-caulículos, muestra una solución no demasiado extraña entre los capiteles derivados de las variedades asiáticas (corintio asiático), propios de los tiempos de Justiniano. Algunos estudiosos dicen que son "copias medievales" de capiteles bizantinos... acaso porque de otro modo, se romperían los axiomas básicos sobre los que construyen sus propuestas metodológicas.
Si alguien desea ver "copias" o reinterpretaciones medievales de capiteles corintios, deténgase ante los asturianos. Al parecer, muchos años después de la realización de una edificación regia en el Naranco, tallistas "maravillosos", con habilidades, herramientas y recursos técnicos no documentados en Al-Ándalus ni en ningún otro sitio de gran relevancia histórica,  fueron capaces de recuperar las tradiciones bizantinas y el sentido del orden corintio, según las corrientes "asiáticas", para ornar pequeñas iglesias rurales en terrenos de la actual provincia de León... ¿Ciencia-ficción o historia-ficción?

Capitel derivado del corintio asiático de la Yerebatan Sarnıcı (Estambul); debió ser realizado antes del año 532

Capitel de Sahagún de Campos
Reinterpretación medieval del orden corintio: capitel de Santa María del Naranco (ha 842)

lunes, 24 de septiembre de 2012

El museo de Valladolid

Es otro museo que participa de las circunstancias comunes a la reutilización arquitectónica.
El día que acudimos a visitarlo, un sábado, sólo se podía entrar en la sección de arqueología...  "por falta de personal", según testimonio de quien nos entregó la entrada.
—Pero entresemana se pueden visitar todas las salas —repuso.

"Retrato de un particular", s. II, Medina de Rioseco
Los paneles contienen textos que me han parecido claros y correctos, aunque el ambiente de las salas recuerda mucho los museos más casposos de mediados del siglo XX. La iluminación es manifiestamente mejorable y algunas salas de la sección de bellas artes parecen pensadas para fomentar la actividad física. ¿Ascensor? ¿Dónde?
Teniendo en cuenta las servidumbres dinámicas de estos museos, no se me ocurre cómo se podría ampliar para recibir productos aparecidos en nuevos estudios arqueológicos... aunque acaso, tal y como están las cosas, esa circunstancia sea irrelevante.
Las personas que atienden al público son, como de costumbre, sumamente amables. Una de ellas, con quien nos lamentamos de la situación del museo,  nos indicó que en invierno deben colocar cubos para recoger el agua de las goteras... Ello asegura el control absoluto de las condiciones ambientales del museo; no quiero ni imaginarme cómo estarán las partes inaccesibles al público, aunque lo imagino.
Cuando recorríamos sus salas sin compañía, entró un grupo de ocho o diez personas para visitar el patio; en cinco minutos, según las indicaciones de la "guía local", salieron de nuevo a la calle. El museo está incluido en los circuitos turísticos, pero sólo por sus cualidades arquitectónicas, interesantes en el contexto de la arquitectura castellana del siglo XV. Fue palacio del banquero Fabio Nelli.
Y sin embargo, tiene obras de cierto interés, como el retrato romano de Medina de Rioseco, las estelas funerarias...

Ente lo más relevante de sus fondos —desde mis preocupaciones—, ocupa un lugar destacado el fragmento de capitel de Villa de Prado, del que se ofrece una restitución sumamente aventurada, pero razonable. Me parece un testimonio importante para retrasar la cronología de las piezas "degeneradas" o muy evolucionadas; hay varias piezas comparables a ésta y repartidas por la geografía hispana, que se suelen clasificar en el siglo VII.


También tiene interés la pila de Tiedra, que suponen "hispanovisigoda, del siglo VII". Participa del fenómeno de "inflación" asociado a la época visigoda. Seguramente fue realizada antes, en el contexto de los primeros cristianos de esa zona; al menos, de eso informan los motivos ornamentales, afines a los de las lápidas sepulcrales cristianas de los siglos V, VI y VII.

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En el museo existe un panel que, como el de Soria, arroja información relevante sobre la implantación de los visigodos en la zona vallisoletana:

"En la provincia de Valladolid no se ha localizado ningún cementerio atribuible a los visigodos inmigrados, tan solo ciertos enterramientos ligados a una fundación monástica en San Román de Hornija pueden ser atribuidos a la población germánica arriana. Sin embargo son abundantes las necrópolis hispanovisigodas atribuibles a la población hispanorromana contemporánea o posteriores a la unificación religiosa decretada en el III Concilio de Toledo: Alcarazén, Amusquillo, Cabezón, Castroverde, Cogeces de Íscar, Herrera, Medina de Rioseco, La Overuela, Pesquera de Duero, Piña de Esgueva, fase final de la necrópolis de Simancas, Torre de Peñafiel, Villabáñez..."

Deduzca el lector qué tipo de arquitectura monumental puede corresponder a esa fase...


Los canecillos de San Cebrián de Mazote se sitúan en el siglo X: "Canecillos de alero mozárabes, siglo X". A mi juicio, se debería ampliar el marco de atribución hasta el siglo VI.  Canecillos parecidos están documentados en contexto arquitectónico en la mezquita mayor de Córdoba, pero sobre todo en Santa María de Lebeña y en Santiago de Peñalba. Sin embargo, los elementos ornamentales de los canecillos de Mazote (como los de las otras iglesias "mozárabes") también nos remiten a obras hispanorromanas: las estrellas hexagonales son habituales en las estelas encontradas en buena parte de la península Ibérica; en el museo de León hay varias.  A ello deberíamos añadir una circunstancia obvia, olvidada por quienes establecen a través de ellos una "vinculación clara" con lo cordobés: los canecillos, las ménsulas de los aleros de los tejados, son elementos "necesarios" para alejar de las fachadas el agua de las cubiertas a dos aguas. Y están documentados con cualidades formales diversas en todas partes, en todos los momentos culturales; así, pues, no es apropiado emplearlos para establecer relaciones culturales, sobre todo, cuando no median afinidades claras. La relación de los de Mazote con los de Lebeña y Santiago de Peñalba son obvias, pero no con los de Córdoba.
La aparición en  San Cebrián de Mazote condiciona la adscripción a las circunstancias históricas propias y desde ellas, de nuevo surge el "problema mozárabe", en este caso con matices más claros, porque buena parte de los elementos arquitectónicos (especialmente,  los capiteles) de la iglesia son reutilizados. Aceptando que lo más relevante de la actual iglesia (dejando a un lado, por supuesto, las "restauraciones modernas") fue "armado" durante el siglo X —en el caso de Mazote me parece clara la datación en el siglo X—, podríamos deducir que esa época es "límite máximo" de atribución.  ¿La época "mínima"? La que adjudiquemos a las piezas reutilizadas del interior... porque los modillones de rollos podrían pertenecer a la edificación o edificaciones de las que los obtuvieron, probablemente, del siglo VI.


El tenante de Wamba está clasificado como "hispanovisigodo, del siglo VII". Creo que se debería ampliar la banda de adscripción cronológicas, quizás hasta el siglo X; los elementos ornamentales ofrecen un tratamiento demasiado tosco, próximo al de los relieves de Quintanilla y las iglesias llamadas "mozárabes" (exceptuando Santiago de Peñalba y Lebeña). Los restos más antiguos que aún se conservan en la cabecera de Wamba tienen una concepción de labra poco alejada de esta pieza, que, por motivos ornamentales, también hace pensar en las estelas hispanorromanas y, por lo tanto, en la permanencia de esos influjos autóctonos.






Hay varios fragmentos de canceles, procedentes de Wamba, clasificados como  "neovisigóticos"  de entre los siglos VIII y X. Los biselados, comparables a los de Quintanilla de las Viñas, es  probable que sean del siglo X (o de las proximidades del año 1000). El otro, el que ofrece doble sogueado, puede ser anterior; según mi criterio, debería clasificarse en los alrededores del siglo VI, como algunos de los capiteles de San Román de Hornija.






La pila gallonada, con ornato geométrico en el borde, se valora como "pila árabe del siglo XIV". La carencia de elementos de ubicación cultural clara complica mucho su clasificación. Si procediera de Wamba, debería modificarse radicalmente la filiación, hasta, al menos, el siglo VI, en relación al capitel bizantino que aún se conserva en su iglesia y que documenta, cuando menos, actividad cultural singularizada, respecto de otras regiones hispanas. Las piezas descontextualizadas suelen ser más difíciles de evaluar arqueológicamente.




También hay dos capiteles califales en mal estado de conservación; ambos son de tipo compuesto califal y tienen muchos paralelos repartidos en los lugares de mayor concentración de estos elementos:  museos de Córdoba , Madrid y Sevilla, Giralda, etc.  El que tiene la superficie más erosionada, puede ser de la primera mitad del siglo X; el segundo, muy fracturado, ofrece labra con mayor peso relativo de las zonas de sombra y, por consiguiente, puede ser posterior, de la segunda mitad del siglo X. Ambos fueron realizados, muy probablemente, para edificaciones cordobesas (incluyendo Medina Azahara y Medina Azahira).

A la salida, observé que junto a la taquilla habían colocado un "Libro de firmas de visitantes en apoyo de la ampliación del museo", con el siguiente texto:

"Museo de Valladolid. Asociación de Amigos del Museo
Desde 2004, el Museo de Valladolid está esperando llevar a cabo un proyecto de ampliación, restauración y reforma integral que le permitirá modernizarse y prestar mejores servicios.
Ante los problemas surgidos para la autorización de las obras y para reiterar la necesidad de las mismas, el Museo tendría en gran estima el apoyo de sus visitantes."

La última firma del día 25 de agosto tenía a su lado el número 3263. Me pregunté en cuánto tiempo, pero me dio vergüenza preguntarlo. Sentí la tentación de unirme a la petición, pero soy muy sensible a las "demandas sociales canalizadas" desde las instituciones y además, me pregunté qué sentido tendría una iniciativa como esa.  ¿Un proyecto de ampliación, restauración y reforma integral? ¡Naturalmente! Pero tal y como están las cosas esa petición es poco realista. Con sentido práctico, acaso fuera más necesario, para empezar, que hubiera dinero para mantener abiertas todas las salas... no sólo los días laborables.

domingo, 23 de septiembre de 2012

Otra reforma educativa


¿También este gobierno cree que los problemas sociales más graves se resuelven con leyes? ¿Desean elevar aún más el listón de la estupidez política en cuestiones educativas? Dicen que las personas aprenden de los fracasos, pero algunas personas están tan condicionadas por sus intereses inmediatos que perdieron la voluntad por aprender. "Es mejor no mirar la espuma de los días". Además, el conocimiento es menos útil que el dinero y más problemático.
Se ha hecho público el anteproyecto para la nueva ley que, según sus promotores, resolverá todos los problemas acumulados tras muchos años de estupideces.  Supongo que cuentan con la ayuda divina o eso deduzco de uno de los "puntos de partida" citados en la documentación que ofrece el ministerio (con "m "minúscula) y que me ha puesto los pelos como escarpias:

"La calidad educativa debe medirse en función del "output" (resultados de los estudiantes), no del "imput" (inversión, nº profesores/unidades)" (PUNTO DE PATIDA III)

Se han quedado calvos, pero al hilo de cómo han redactado "el punto" se me ocurren varias cosas:
1. ¿No saben explicarlo en castellano? Empezamos mal; sobre todo, si empleamos los términos ingleses con precisión relajada.
2. En todo caso, se valorará la calidad del sistema en función de los resultados que reflejen los alumnos, aunque no lo reconozcan así desde el ministerio (con "m" minúscula). Pero la cuestión es "tener cabeza" para determinar los factores que inciden en esos resultados y esa formulación —como todo el documento— parece escudo para justificarse únicamente ante quienes votan al partido gobernante, cuando los sectores críticos formulen una obviedad: el incremento de la reducción presupuestaria puede dinamitar radicalmente cualquier intento de reforma, por muy voluntariosa y sensata que ésta sea. El mejor plan educativo del mundo sería inaplicable en España ahora y durante los años próximos porque la inmensa mayoría de los profesores están encabronados y, en las condiciones políticas actuales, esa situación va para largo. Además, cada paso que da el señor Wert, empeñado en apagar fuegos con gasolina, el encabronamiento sube dos puntos.
3. Desde mis pobres conocimientos de hermenéutica política, se me ocurre la siguiente traducción al punto del output-imput: "Incrementaremos la calidad educativa con menos dinero". Así, con dos... cajones.

Muchas de las observaciones recogidas en el documento son, en principio, sensatas; otras, discutibles y algunas... Algunas abrirán la caja de Pandora. En todo caso, la situación social actual es tan mala que no se me ocurre cómo compensar sus efectos sobre los niños y los jóvenes, incluso aunque la nueva ley educativa fuera redactada por ángeles bajo inspiración divina..

El Museo de Burgos

Después de algunos intentos baldíos y tras llamar por teléfono, acudimos a visitarlo a finales de julio; según nuestro interlocutor, "de momento", se podían  ver las dos secciones (bellas artes y arqueología)...
Como en otros museos de Castilla León del mismo tipo, los sábados y los domingos la entrada es gratuita; el resto de los días de la semana cobran 1,20 €; a quienes acuden en grupo, 0,60 €. Francamente, no entiendo tarifas tan ridículas... pero como no entiendo tantas otras cosas, una más no importa.
Es un museo próximo al Complejo de la Evolución, con aceptables instalaciones aparentes, dentro del universo de los museos provinciales españoles, acaso porque no es muy vetusto. Nació, en la configuración actual, de la unión tres edificios: las casas de Miranda, Íñigo Angulo y Melgosa, hace menos de 30 años; la última fase del museo, la sección de Bellas Artes, fue inaugurada en 1991.
Seguramente, por esta circunstancia, que parece endémica, no existe correspondencia entre las necesidades de funcionamiento y las posibilidades presupuestarias, progresivamente reducidas. Al menos, eso deduzco de las quejas públicas de su directora en los medios de comunicación y de la escasez de vigilantes, que impone las restricciones sufridas, al menos, durante el pasado año, cuando no pudimos entrar porque las salas de arqueología estaban cerradas.


Esa circunstancia dio lugar una anécdota surrealista, que con el paso del tiempo, ha cobrado significación añadida... pero que no contaré (de momento) por evitar inconvenientes previsibles a quien la protagonizó. Sírvale al lector saber que, por lo menos, algunos vigilantes están desbordados por la superficie que les encomiendan y que parecen estar muy presionados, a la vista de cómo reaccionan ante una situación anómala, aunque previsible. No puedo imaginarme qué instrucciones les habrán dado, teniendo en cuenta que el trato de todos  ellos fue, como de costumbre, muy amable; a la salida, la señora de la entrada se interesó por nuestra experiencia; el da la planta baja, que me vio fotografiando las "cosas medievales" me indicó la existencia de algo que no había visto y quién cuidaba en otra zona respondió con amplitud a cuantas preguntas le hicimos sobre la procedencia de algunas piezas, escasamente documentadas en las cartelas. Entrañable.
Precisamente, uno de los aspectos más criticables desde el punto de vista del visitante ocasional, está en ese detalle: las catelas y los paneles informativos son escasos, imprecisos y, en ocasiones, poco actualizados o discutibles.  Además de la página oficial, sujeta a los patrones normativos de la Junta de Castilla y León, existe una página "no oficial" más operativa que la oficial, pero sin muchas diferencias con las cartelas del museo.
Tiene varias plantas comunicadas mediante un pequeño ascensor... Como en otros museos de Castilla-León,  rezuma precariedad por todos los poros. No quiero ni imaginarme las carencias en cuestiones no observables por el público, pero substanciales para el buen funcionamiento (almacenes, medios técnicos, restauración, gestión administrativa...)


También en este museo se advierten las "anomalías" asociadas a la documentación material de la época islámica de la meseta castellana. Apenas se pueden ver piezas islámicas locales (los marfiles son fueron realizados en Burgos), pero son numerosos los restos "mozárabes"; es decir, no está documentada la cultura "madre", pero sí la más que dudosa "hija". La justificación objetiva de esta anomalía es simple: las tierras burgalesas (como casi toda Castilla) no "padecieron" una islamización profunda entre los siglos VIII y X, porque incluso durante el siglo X la zona estaba más vinculada a los "señores" cristianos que a los dignatarios musulmanes, con independencia de que unos y otros estuvieran supeditados al poder califal o a los diferentes grupos del poder califal. De ahí que Gómez Moreno tuviera necesidad de recurrir a comunidades emigradas para sostener el fenómeno "mozárabe". Y de ahí que sea difícil documentar la cultura emiral en todas las provincias castellanas, y que sea tan complicado encontrar influjos cordobeses en las obras adjudicadas al siglo X, unas veces con razón y otras sin ella.
Lo más curioso es que, a pesar de esa circunstancia, toda Castilla experimentó un influjo cultural islámico muy fuerte a partir del año 1000, justo cuando las dignidades de Al-Ándalus ya no tenían potestad sobre la Meseta; ese influjo, asociado a los grupos de musulmanes asentados en amplias zonas (bereberes y autóctonos), se materializó en la arquitectura (mudejarismo), pero también en otras esferas de la realidad cultural castellana. Todavía durante el siglo XV, los nobles castellanos gustaban vestir con aderezos derivados de las costumbres islámicas y se hacían retratar con esas galas o parte de ellas para los monumentos funerarios. El museo de Burgos conserva el sepulcro de Gómez Manrique y Sancha de Rojas, procedente del antiguo monasterio de Fresdelval (mediados del siglo XV) con esa particularidad.

Piezas destacadas (según mis "intereses personales")



El museo contiene una muy interesante colección de estelas funerarias, adjudicadas sin mayores especificaciones entre los siglos I y III d.C., que ilustran sobre el carácter de la romanización en esta parte de Hispania. Algunas presentan formas geométricas y recercados laureados que podrían estar indicando el origen de ciertas formas ornamentales de la Alta Edad Media.
Destacan los restos de Clunia, pero sobre todo, algunas piezas sueltas; entre ellas, los marfiles hispanoislámicos, uno de los cuales estaba en Oña, seguramente para acreditar la calidad eboraria de los talleres cristianos del siglo XI: por fortuna, sí pudimos contemplar el "estuche" califal , una de las obras más singulares de los talleres cordobeses

El capitel procedente de Padilla de Abajo, aparece clasificado como "arte mozárabe, siglo VIII-X". Mantiene la estructura del orden corintio, pero está cubierto de una retícula de formas biseladas que lo aleja de los usos más frecuentes. Creo que sobra el término "mozárabe" (no aprecio influencia cordobesa), aunque en esta ocasión sí podría tratarse de una obra de los alrededores del año 1000 aunque es difícil alcanzar una conclusión sin ver la parte superior del ábaco, a la que no se puede acceder sin una escalera.


También hay un "capitel de parteluz. Arte mozárabe, siglo VIII-X", procedente de Busto de Bureba. Se trata de una pieza alargada de tipología singular, que no sabría relacionar con ninguna otra, aunque algunos de sus elementos podrían conducirnos a referencias orientales y a recursos documentados en la mezquita mayor de Córdoba. ¿Mozárabe? Si lo dicen en el Museo de Burgos, así será.


El grupo "mozárabe" se amplía con un conjunto de "dinteles" procedentes de Valmayor de Cuesta Urría; tienen incisiones decorativas estilizadas y sencillas, sin motivos animados, pero con forma de arco de herradura... ¿Arco de herradura? Si tiene arco de herradura, tiene que ser visigodo o mozárabe; si el "peralte" es grande, será mozárabe. La carencia de elementos de caracterización cultural clara, impide un juicio argumentado, desde mis conocimientos. Pero si lo dicen en el museo de Burgos que son "mozárabes, del siglo X", así será.



La cubierta de sarcófago del monasterio de Valeránica de Tordómar, ofrece elementos que podrían ser muy anteriores, porque son afines a los que aparecen en lápidas funerarias de cronología anterior. No obstante, si en el museo de Burgos, dicen que es el siglo X, así será. La misma procedencia tienen dos fragmentos de cancel y un cimacio, que en el museo clasifican como "arte mozárabe, siglo VIII-X"... Sin otros datos es difícil discernir su filiación cultural, pero desde sus cualidades entiendo que se podría ampliar el margen de atribución hacia los siglos anteriores.

En sus salas están algunas piezas procedentes de Quintanilla de las Viñas, acompañadas de un panel con el siguiente texto:
"Un lugar destacable en este panorama (mundo paleocristiano y visigodo) ocupa la Ermita de Ntra Sra. de Quintanilla de las Viñas, cuya arquitectura se sitúa entre los ejemplos más significativos de la Península, en base, fundamentalmente, a los bajorrelieves que la ornamentan. Tallados a bisel, enlazan con la tendencia del arte romano provincial del Bajo Imperio, estando, sin embargo, en conexión con la plástica hispnovisigoda que se constata en el siglo VII en la Meseta, por ejemplo San Pedro de la Nave (sic). Su decoración consiste en elementos vegetales, sobre todo roleos de vid, algún motivo animal y figuras humanas alegóricas en el arco toral".
Creo que no debo añadir nada a lo ya expuesto en otra entrada.

Me vuelvo a preguntar qué sentido tienen estas entidades agónicas, que existen al margen del interés ciudadano y, por supuesto, de las autoridades políticas, permanentemente condicionadas por las demandas de quienes les votan. Desde los imperativos del sistema liberal, sabiendo que apenas visitan el Museo de Burgos 20.000 personas al año, lo que supone una recaudación miserable, que no da ni para pagar el sueldo de la directora; si no "funciona" como infraestructura turística y sólo interesa a grupos minoritarios; sabiendo que es fácil compensar con otros medios sus posibilidades educativas...  ¿No deberíamos cerrarlo?
La pregunta es irónica, pero consecuente.

viernes, 21 de septiembre de 2012

La galería Arauna y el patrimonio urbano


"Por no respetar la fachada original del edificio" el Ayuntamiento de Madrid ha precintado la sede de la calle de Barquillo de una de las galerías de arte más importantes de España, Oliva Arauna, con casi 30 años de trayectoria y presencia habitual en ARCO".

Cuando la galería se instaló en la nueva sede de la calle Barquillo, decidieron modificar la fachada del negocio precedente —un restaurante de drag queens—, sin esperar la conformidad municipal.
Seguramente el Ayuntamiento de Madrid hace las cosas con criterios discutibles y seguramente la solución de Oliva Arauna es estéticamente muy elogiable, pero mientras no llegue el Apocalipsis —quizás quede poco—, todos estamos obligados a respetar la normativa municipal en asuntos de conservación del patrimonio inmobiliario protegido y, muy especialmente, quienes, en razón de oficio o beneficio, tenemos o debemos tener especial sensibilidad ante él. Lo contrario conduce al imperio de la subjetividad absoluta, a situaciones esperpénticas como la de Borja.
Ahora bien, si el fondo del problema es la incapacidad municipal para hacer funcionar correctamente servicios  "no rentables",  a lo mejor Madrid no es lugar adecuado para instalar una galería de arte homologada con las de cualquier ciudad europea.

Surrealismo creciente en Borja.

Lo que faltaba... Según los "medios", Cecila Gómez, la restauradora voluntariosa de Borja, quiere participar del maná que cae sobre el pueblo.  Como a la Corporación Municipal se le ha ocurrido cobrar por entrar a ver la pintura del recochineo planetario, pretende recibir los correspondientes derechos de autor.
No quiero ni imaginarme lo que estará sucediendo en la cabeza de los grafiteros de mi barrio ni en la de los párrocos de otros pueblos de la piel de toro.
A lo mejor es buena idea para estimular el turismo...  y, desde luego, mucho más barata que cuidar el patrimonio como es debido.

jueves, 20 de septiembre de 2012

El museo de Zaragoza.


Ocupa un edificio construido alrededor de un patio sensiblemente cuadrado, para la Exposición Hspano-Francesa de 1908. Fue remodelado entre 1974 y 1976 y desde entonces, el museo ha cambiado poco en lo que percibe el visitante ocasional, pero mucho en lo que aprecia un visitante más curtido.


En la entrada nos ofrecieron un díptico en formato DINA4 con textos alusivos a la exposición del momento: "¿Verdadero o falso?". Por fortuna, el díptico también contiene planos con la distribución de las salas.
La zona de acceso y el patio determinan un espacio sumamente agradable. Desde él nos dirigimos a la parte romana, muy cambiada desde la visita que hicimos hace años. Si no me equivoco —podría ser—, han realizado una selección radical, otorgando gran relevancia a los objetos de mayor excepcionalidad y a los procedentes de Villa Fortunatus (o Fortv-Natus).
La instalación se completa con un planteamiento escenográfico de ciertas pretensiones que incluye una habitación romana reconstruida y titulada en el cartel correspondiente de modo hermenéuticamente curioso: "Un espacio de convivencia: el triclinio de la calle Añón". El resultado global es, a mi entender, bastante atractivo y pedagógicamente eficaz, contando incluso con los problemas de exhibición de los mosaicos.


Las cartelas son irregulares; en unos casos contienen información clara y concisa; en otros, manifiestamente mejorable, como la de la "Venus Ino-Leucothea" (Inventario 07637):
"Roma, procedencia desconocida. Depósito de la Real Sociedad Económica Aragonesa de Amigos del País. "Tipo de Afrodita-Ino-Leucothea", réplica mármol de Carrara.
Réplica del tipo Afrodita-Ino-Leucothea. Viste himation que le cubre el brazo izquierdo, pasa encima de éste y desciende sobre la espalda, después sobre la cadera derecha y doblándose sobre el abdomen, asciende hasta la cadera izquierda, cayendo sus extremos lateralmente hasta los pies. De estilo clasicista evidencia sus antecedentes en los tipos escultóricos del siglo V a. de C. Existen otras réplicas (hasta la veintena) del modelo en Ostia, Berlín, Museos Vaticanos...
La creación del tipo, sobre los antecedentes mencionados, debe corresponder al final del s. II a. de C. y los modelos artísticos con los que presenta mayores semejanzas (Thasos, Budapest...) aconsejan su datación en el siglo I a. de C. Los estudiosos del modelo han dudado entre la atribución a Afrodita (Bernouilli) o Ino-Leucothea (Lippold)"
La descripción, tomada de un artículo de Balil es, a mi juicio, innecesaria, teniendo en cuenta que la obra está a la vista del espectador. Y me hace gracia el énfasis que pone en las telas, como si pretendieran domesticar la concupiscencia pecaminosa del visitante.. ¿No sería mejor destacar el contraste entre la morbidez del cuerpo y el juego de contrastes de las telas?
La parte no estrictamente descriptiva parece perseguir el objetivo de resumir el artículo mencionado... Sería más razonable incluir la referencia bibliográfica en el cartel o, incluso, teniendo en cuenta los chismes que usan los adolescentes, el enlace de Internet. Y para ayudar al espectador "normal" (estadísticamente normal), a lo mejor es oportuno indicar quién fue Leucóthea, "la diosa blanca". A R. Graves le sirvió el hermoso nombre para titular un libro heterodoxo sobre mitología (The White Goddess,1948), que recomiendo muy encarecidamente al lector. Para empezar...


Tiene especial interés el cancel procedente de Villa Fortunatus, atribuido al siglo VI, con crismón y friso de arquillos semicirculares. Dejaré entre paréntesis su valoración cronológica... No me siento capacitado, de momento.


Asimismo, es muy interesante el fragmento de cancel aparecido a finales del siglo XIX en las cercanías del Pilar. El panel dice: "Este elemento arquitectónico estaba integrado en la iglesia mozárabe de Santa María la Mayor (siglo X) antecesora de la actual Basílica. Está talado en alabastro aragonés. Decoraciones similares se conocen en relieves de la iglesia de San Miguel de Escalada (León), consagrada en el año 913, aunque su estilo decorativo y la ornamentación vegetal se tienen que relacionar con relieves coptos de Bawit (Egipto)".
¡Cuánta seguridad! ¿Cómo no iba a existir una iglesia mozárabe en Zaragoza? Faltaría más. La relación de esa pieza con las de Escalada, las de Bawit y otras muchas de gran influencia oriental está clara. Lo que distingue a ésta frente a las de Escalada, la falta de ornato animado, podría servir para retrasar su clasificación, por supuesto, mucho antes del siglo X.


Después de patear el museo, incluyendo las salas dedicadas a las piezas orientales de la colección de Federico Torralba, me dirigí a un vigilante, que no nos perdía de vista...
—"Todas las piezas islámicas del museo están guardadas"— respondió con seguridad; y al ver mis ojos dilatados, continuó— "es que no hay espacio para colocar todo lo que hay en los almacenes..."
—Ahhh! —respondí.
¿A quién le interesarían piezas tan exóticas? Además, todo el mundo conoce la trascendencia de la cultura japonesa para la formación del "espacio de convivencia aragonés".  ¿Qué importancia pueden tener los nueve siglos de "islamización"? (404 años de islamización institucional más 492 de moriscos). Además, ahí está la Aljafería para quienes tengan interés en las culturas "diferentes"...