miércoles, 14 de noviembre de 2012

LOS JEQUES MECENAS

Por Carlos Brayda


Es un caso extraño el de los Emiratos Árabes Unidos, un país nacido de la arena y del viento ardiente del desierto, del que rezuma vida, pero si petróleo, el oro negro. Con el paso de los años, este pequeño reino constituido por siete emiratos ha triunfado en la escena internacional y ha conseguido mucho en muy poco, llegando hasta el puesto 35º en lo que a Producto Interior Bruto se refiere.
El origen de la fortuna de esta nación fue y es el petróleo, el cual significó el ingreso del 74% del PIB en los años 80 y el 38% en el 2006. Poco a poco el PIB introducido por el petróleo y el gas natural se va reduciendo debido a las políticas exteriores llevadas a cabo por el gobierno, entre las que destacamos dos: la creación de zonas libres de impuestos y la creciente industrialización del país, que también permite a empresas extranjeras poseer la totalidad de esta. Esta apertura casi total al mundo occidental ha provocado en los EAU, especialmente en las más altas esferas, las mismas inquietudes y deseos que en las altas sociedades occidentales, incluyendo por supuesto las inquietudes artísticas.


En la capital del estado Abu Dhabi, nos encontramos con la cuarta edición del Abu Dhabi Art, una exposición temporal con posibilidad de comprar las obras expuestas, en la que las grandes estrellas fueron obras de Picasso, Calder, Lichtenstein, aunque el favorito de todos fue Anish Kapoor (Bombay, 1954). También triunfaron los iraníes Moshiri o Neshat así como el surcoreano Shin Sang-Ho. Choca la gran diferencia del exterior (un aparcamiento sobre la arena) con el interior, un lujoso interior cuyo suelo se halla cubierto por una alfombra roja.
Esta edición del Abu Dhabi Art, que dió fin el diez de este mes, se inauguró en una de las islas que conforman la capital, el proclamado distrito cultural de la ciudad, donde se contruiran en los próximos años un museo nacional, así como franquicias de los museos Louvre y Guggenheim.
En esta edición encontramos 600 obras de 400 artistas y se han recibido aproximadamente a unos 17.000 visitantes de los 8 millones de habitantes que posee el país y que va aumentando cada año, ya que al parecer el tabú islámico acerca de la representación humana no va con los habitantes de este país, o al menos con los interesados en esta exposición, que se dan cuenta de la gran herramienta política y económica que resulta ser el Arte.
“No hay tradición de coleccionismo, pero es cierto que cada vez existe más interés. Están experimentando y aprendiendo de las sensaciones que el arte produce, y año tras año se sienten más confortables con ellas. Además, en la actual coyuntura el arte es una inversión rentable”.  Explica Paloma Martín Llopis, directora de la galería neoyorquina Edward Tyler Nahem, que llevó al Abu Dhabi Art de este año la obra Torero, pintada por nuestro compatriota Picasso en 1970.
Quizás sea el Arte una manera pacífica y civilizada de estrechar lazos entre dos culturas tan históricamente enfrentadas como son Occidente y Oriente, dado que son con este tipo de ferias con las que conocemos a nuestros hermanos de más allá del Mediterráneo, quizás sea esta una de las maneras de ganar que ambos mundos ganen dinero y cultura sin la necesidad de bombardearse mutuamente, quizás.


Referencias:
http://cultura.elpais.com/cultura/2012/11/09/actualidad/1352488828_885003.html

1 comentario:

  1. La exposición de este año en la Tate Modern en Londres de obras de Damien Hirst ha sido financiada por la familia real de Qatar. La jequesa Al-Mayassa bint Hamad bin Khalifa Al-Thani, hija del Emir, es la responsable del Qatar Museums Authority. La familia Al-Thani pagó 250 millones de dólares en 2011 por el cuadro de Cézanne "Los jugadores de cartas".

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