Por Eva
El pasado martes, doce de noviembre, Matt Mullican acudió al Reina Sofía para, según el museo, dar una "conferencia performativa".
Matt Mullican es un artista americano cuyo trabajo tiene que ver con los sistemas de conocimiento, es decir, el lenguaje y la significación. También trabaja con la relación entre la percepción y la realidad, entre la capacidad de ver algo y la capacidad de representarla. Utiliza una gran diversidad de formatos, como performances, dibujos, pinturas, banderolas, tapices, etc. para presentar una reflexión basada en una visión del mundo que se resiste a la aparente diseminación de los medios.
La gran mayoría de los asistentes pensábamos que, con tal definición por parte del museo, Mullican haría su performance, pero al final, el evento se quedó en conferencia, sin más. Primero nos explicó la raíz de sus intervenciones, cosas que él soñaba e imaginaba; nos expuso mediante diapositivas varias de sus exposiciones y obras que había realizado a lo largo de su vida y, por último, nos puso un vídeo de una performance que hizo bajo hipnosis en Zürich en 2004, la cual pensábamos que realizaría en esta conferencia “performativa”. Salimos un tanto decepcionados ya que íbamos con la idea de ver un caso real de hipnosis. Por eso, al llegar a la entrada en grupo, el guardia de seguridad se sorprendió y nos preguntó más de una vez que si íbamos todos a ver a Matt Mullican o queríamos ver el museo, y ya vemos el porque de su sorpresa frente a tanto público. ¿Por qué el Reina Sofía promociona la ponencia como “performativa” cuando de performance no tuvo nada? Una vez más, publicidad engañosa por parte de este museo.
Dejando a un lado lo que pensábamos que sería y no fue, la conferencia en varias ocasiones estuvo interesante, aunque de vez en cuando se oían ronquidos por la zona de atrás. Mullican nos explicaba cómo nos veía al público cuando se subía al escenario. Él, cuando nos mira, no nos ve a nosotros como tal, ve la luz que se refleja en nosotros. Con ello, objetualiza todo lo que ve, todo son patrones de color y así estos objetos (nosotros) no le pueden herir. Su obra intenta mostrar cómo no hay diferencia entre el objeto y el sujeto, ¿el ser humano es un objeto o un sujeto?, ¿y un cadáver? Mostraba infinidad de dibujos que realizaba, recortes de cómics y fotografías, de mundos inventados y creados a partir de imágenes. Nos explicó que hace hipnosis para poder ver esas imágenes en otro estado mental. Antes usaba a voluntarios para la hipnosis, pero el público se quejaba de que jugase así con los sentimientos de otras personas, pues la hipnosis no es algo que se pueda tratar a la ligera, y por eso ahora sólo él se sume al trance. Para finalizar, habló un poco sobre cómo el arte se está convirtiendo en un teatro, y lanzó una fuerte crítica sobre Marina Abramovic, diciendo que ella estaba haciendo todo lo posible por convertir el arte y la performance en un teatro. Y ahí dejo la cuestión, ¿el arte performance de hoy en día, se está convirtiendo en un teatro y perdiendo sus características principales que le dan tal definición? Que cada uno saque sus propias conclusiones.
El pasado martes, doce de noviembre, Matt Mullican acudió al Reina Sofía para, según el museo, dar una "conferencia performativa".
Matt Mullican es un artista americano cuyo trabajo tiene que ver con los sistemas de conocimiento, es decir, el lenguaje y la significación. También trabaja con la relación entre la percepción y la realidad, entre la capacidad de ver algo y la capacidad de representarla. Utiliza una gran diversidad de formatos, como performances, dibujos, pinturas, banderolas, tapices, etc. para presentar una reflexión basada en una visión del mundo que se resiste a la aparente diseminación de los medios.
Imagen Diario Fuerza |
Dejando a un lado lo que pensábamos que sería y no fue, la conferencia en varias ocasiones estuvo interesante, aunque de vez en cuando se oían ronquidos por la zona de atrás. Mullican nos explicaba cómo nos veía al público cuando se subía al escenario. Él, cuando nos mira, no nos ve a nosotros como tal, ve la luz que se refleja en nosotros. Con ello, objetualiza todo lo que ve, todo son patrones de color y así estos objetos (nosotros) no le pueden herir. Su obra intenta mostrar cómo no hay diferencia entre el objeto y el sujeto, ¿el ser humano es un objeto o un sujeto?, ¿y un cadáver? Mostraba infinidad de dibujos que realizaba, recortes de cómics y fotografías, de mundos inventados y creados a partir de imágenes. Nos explicó que hace hipnosis para poder ver esas imágenes en otro estado mental. Antes usaba a voluntarios para la hipnosis, pero el público se quejaba de que jugase así con los sentimientos de otras personas, pues la hipnosis no es algo que se pueda tratar a la ligera, y por eso ahora sólo él se sume al trance. Para finalizar, habló un poco sobre cómo el arte se está convirtiendo en un teatro, y lanzó una fuerte crítica sobre Marina Abramovic, diciendo que ella estaba haciendo todo lo posible por convertir el arte y la performance en un teatro. Y ahí dejo la cuestión, ¿el arte performance de hoy en día, se está convirtiendo en un teatro y perdiendo sus características principales que le dan tal definición? Que cada uno saque sus propias conclusiones.
No termino de comprender del todo las diferencias que él ve tan claras entre performance y teatro, en muchos casos la línea que separa una cosa de la otra es muy difusa.
ResponderEliminarAquí dejo una pequeña aportación sobre este tema, no es muy actual pero creo que puede resultar interesante al hilo de la crítica que este hombre propone.
http://www.youtube.com/watch?v=natT4xHY39k