El pasado domingo dimos un paseo por el corredor del Henares...
Paramos unos minutos en el Parque Europa (Torrejón de Ardoz), inaugurado no hace mucho y caracterizado mediante "copias" en escala reducida de "monumentos" europeos... Algo así como las reproducciones de intencionalidad pedagógica del siglo XIX, pero con criterio kitsch, en sentido estricto: arte populista en estado puro... Ideal para un museo al aire libre de los horrores estéticos, donde quede de manifiesto la importancia de tres cualidades sumamente importantes del discurso estético contemporáneo: el contexto, la originalidad y el “factor escalar”.
Para alegrarme el día, los gestores municipales han colocado a la entrada un cartel, donde recogen las "instrucciones de uso"; merecen ser destacadas unas pocas:
—Cuide y salvaguarde los monumentos (sic) del parque. Está completamente prohibido hacer pintadas, grafitis y dañar los mismos.
—Queda prohibido el baño, así como beber agua del riego ya que no es potable.
—Está prohibido introducir botellas y recipientes de vidrio en el parque, así como la práctica del botellón (sic)
—Las fotografía y los vídeos realizadas (sic) en el Parque (sic) no se podrán utilizar con fines comerciales o lucrativos sin autorización previa.
¿Monumentos? ¿Autorización para hacer fotografías con finalidad comercial? ¿Parque con derechos de imagen restringidos? Quien haya redactado el cartel ha de ser un acreditado "profesional de la cultura", según los criterios de la actual ministra de cultura...
Enfilamos la antigua carretera de Barcelona para acercarnos a Alcalá de Henares, población de reminiscencias personales difíciles de calificar y de olvidar. Con el ánimo cauterizado por completo y el recuerdo de otras anécdotas más recientes, tras dejar el coche en ese aparcamiento sumamente irregular y polvoriento anexo al remozado Palacio Arzobispal (¡qué contraste!), nos acercamos al convento de la Madre de Dios, hoy Museo Arqueológico Regional.
Siguiendo la costumbre, rectificamos el camino un segundo para intentar acceder a las Bernardas, por ver si acontecía el milagro y podíamos hacer una visita rápida a la iglesia de Gómez de Mora… Imposible sin someterse al protocolo de las visitas guiadas.
En el Museo Arqueológico “ponen” una exposición con restos del Cerro del Molinete (Cartagena)…
Me vino a la memoria una conversación con Eduardo Ripoll Perelló, cuando estaba al frente del Museo Arqueológico Nacional. Hablábamos de tesis y tesinas y se preguntó en voz alta el interés social de las investigaciones excesivamente monográficas. Citaré sus palabras exactas... salvo fallo de memoria: “¿Qué sentido tiene hacer una tesis doctoral sobre el sarcófago número 14 de tal o cuál necrópolis?"
Cabría preguntarse algo parecido en este caso, incluso, aunque el título despierte expectativas de espectacularidad... ¿Una exposición sobre restos del Cerro del Molinete en el Museo Arqueológico Regional de la Comunidad de Madrid? ¿Propaganda turística de la región murciana?
Lo más interesante, según mi criterio (naturalmente): los capiteles romanos... que pude fotografiar sin impedimentos de los vigilantes... La rectificación de quien tiene poder debería ser un recurso natural, como lo es de todos los humanos.
Tengo la impresión de que en las regiones españolas menos desarrolladas en estos asuntos (Castilla-León, Castilla-La Mancha, Extremadura, Andalucía, Madrid...) se entiende la actividad de los museos y la oferta cultural, en general, pensando exclusivamente en los jóvenes de los centros educativos públicos y en las excursiones del Imserso. El resto de las personas interesadas no parecen preocupar demasiado a sus gestores políticos...
Seguro que el Gobierno de la Comunidad de Madrid ahorra mucho dinero con exposiciones como ésta, pero...
No hay comentarios:
Publicar un comentario