martes, 9 de octubre de 2012

Una carta muy interesante

Ayer se abrió la subasta en eBay para pujar por una carta de Albert Einstein, redactada en alemán, fechada en 1954 y dirigida a Eric B. Gutkind, que había escrito un libro titulado Choose Life: The Biblical Call to Revolt." La carta es muy interesante porque altera radicalmente la imagen ofrecida de Albert Einstein desde "ciertos ambientes". Se estima que pagarán más de 5 millones de dólares.


Los medios han enfatizado algunos párrafos, derivados de la traducción inglesa ofrecida por eBay:
"Inspirado por la insistencia de Brouwer, he leído cuidadosamente su libro; le estoy muy agradecido por enviármelo. Observo que en la actitud objetiva frente a la vida y la condición humana tenemos mucho en común . (...) Sin embargo, sin la sugerencia de Brouwe jamás me hubiera enfrentado intensamente con su libro porque está escrito en un lenguaje inaccesible para mí. La palabra de Dios no es para mí sino expresión y producto de la debilidad humana; la Biblia sólo es una colección de leyendas respetables pero sumamente primitivas e infantiles. Ninguna interpretación, sin importar cuán sutil sea, puede cambiar esta circunstancia desde mi punto de vista. (...) Para mí la religión judía, como todas las demás religiones, es una concatenación de supersticiones infantiles. Y el pueblo judío, al que pertenezco con sumo placer y con cuya mentalidad tengo gran afinidad, no tiene ninguna cualidad especial sobre los demás pueblos. Desde mi propia experiencia directa, puedo decir que no son mejores que otros grupos humanos, aunque están protegidos de los peores degradaciones por la falta de poder.  No creo que haya nada en ellos de "elegidos".
(...)"

2 comentarios:

  1. La visión que tenía Einstein acerca de la existencia de un Dios ha sido siempre confusa. He aquí el por qué de la revolución que ha causado dicha carta.
    Sin embargo, aunque Einstein no creyese en un Dios como tal, sí que creía en «un Dios que se revela en la armonía de todo lo que existe, no en un Dios que se interesa en el destino y las acciones del hombre». Deseaba conocer «cómo Dios había creado el mundo». En algún momento resumió sus creencias religiosas de la manera siguiente:
    "Mi religión consiste en una humilde admiración del ilimitado espíritu superior que se revela en los más pequeños detalles que podemos percibir con nuestra frágil y débil mente.
    La más bella y profunda emoción que nos es dado sentir es la sensación de lo místico. Ella es la que genera toda verdadera ciencia. El hombre que desconoce esa emoción, que es incapaz de maravillarse y sentir el encanto y el asombro, está prácticamente muerto. Saber que aquello que para nosotros es impenetrable realmente existe, que se manifiesta como la más alta sabiduría y la más radiante belleza, sobre la cual nuestras embotadas facultades sólo pueden comprender en sus formas más primitivas. Ese conocimiento, esa sensación, es la verdadera religión."

    Por ello, más que en Dios, Einstein creía en algo capaz de motivarnos y hacernos sentir.

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  2. La lectura de ese párrafo hace pensar en el panteísmo, si se contempla mediante un prisma filosófico al uso; si se contempla desde una postura más "científica", nos remite a cuestiones de una complejidad incompatible con la simplicidad de las religiones tradicionales. La materia es maravillosa en todo lo que subyace a la simple observación, pero también en lo que está al alcance de los sentidos. :-)))

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