sábado, 2 de febrero de 2019

El Museo Municipal de Almuñécar: un capitel califal y un fragmento bizantino

En ocasiones, los paseos penitenciales que preceden la visita a una institución cultural tienen premio. Y no porque quienes los gestionan se preocupen por los visitantes más allá de aligerarles el peso para que les sea más cómodo el regreso. En este caso, la recompensa deriva de circunstancias ajenas a la voluntad de los gestores... Y nadie imagine que el argado tiene su punto de partida en el sugerente nombre antiguo del lugar:  Sexi. Nada de eso.


Pero vayamos por partes. Almuñécar cuenta con un pequeño museo arqueológico, situado en la parte alta de la antigua ciudad, en el emplazamiento que denominan Cuena de los Siete Palacios y que parece ser una estructura abovedada de "época romana". Según la página turgranada: 
"Este es un complejo abovedado que forma parte de los edificios que rodean la colina de San Miguel. Es uno de los restos urbanos romanos más importantes de España y ahora es el sitio del Museo Arqueológico Municipal.
En el siglo III a C, los romanos llegaron a Almuñécar en un intento por expandir sus territorios. Sin embargo, solo dos siglos más tarde, Sexi experimentó un importante desarrollo urbano que abordaba las necesidades y costumbres de una verdadera ciudad romana. Fue en este momento que se llevó a cabo la construcción del acueducto, que proporcionó más agua dulce a la industria local. Fue entonces cuando se completaron el teatro, el foro y el templo principal de la ciudad.
Debido al espacio limitado para construir estos edificios públicos, se construyó una plataforma sobre la cima de la colina, que fue apoyada por un conjunto de subestructuras. Estas estructuras en forma de cueva todavía se viven parcialmente en la actualidad, y la Cueva de los Siete Palacios (llamada Cueva de los Siete Palacios), llamada así por su cúpula central rodeada por otras siete, se utiliza como museo."


Por si alguien no lo ha entendido bien, reitero que se trata de "uno de los restos urbanos romanos más importantes de España". Supongo que, emulando al guión de La vida de Brian, después de los restos de Mérida, Tarraco, Barcino, Itálica, etc., etc., etc.
En él se han recogido restos de diferentes épocas, enfatizando especialmente la época romana. Junto a ellos y, como si se tratara de un objeto olvidado por un estudioso despistado, también hay un pequeño capitel califal bastante erosionado.

GRAL01
El capitel (GRAL01), descontextualizado del montaje museológico, pertenece a la variedad "corintio de volutas vegetales" y, muy probablemente, fue tallado durante la segunda mitad del siglo X, dado el detalle de "barroquización" que manifiesta el arranque de las volutas obtenidas mediante el desarrollo seriado de palmas de acanto.
Los paralelos, de configuración prácticamente idéntica, son numerosos. Existen capiteles similares en Granada, Madrid (MAN, MLG), Córdoba, Sevilla y hasta en Pisa, donde hay uno de escala superior y ornato un poco más complejo. A pesar de ello, no creo que merezca el castigo de marginalidad que se le otorga en el montaje museológico y museográfico, porque, seguramente y para desahogo de unos y desasosiego de otros, no fue tallado en tierras granadinas, sino en la "muy lejana" Qurtuba...


Aunque el montaje actual enfatiza las cualidades arquitectónicas y algunas piezas como el "Vaso de Apofis I", desde mi humilde punto de vista existe un pequeño objeto de singularidad excepcional que, según intuyo, ha sido valorado en injusta medida. En una vitrina, que según la cartela contiene "elementos ornamentales que debieron formar parte de frisos y que proceden del entorno de la Cueva de los Siete Palacios", podemos ver varios fragmentos de capiteles y, entre ellos, uno de particular interés: es un fragmento de hoja de acanto (GRAL04), que no pudo pertenecer a un capitel exento, dado el carácter sensiblemente rectilíneo de la moldura unida a ella por la parte superior. Se trata, por tanto, de un fragmento de friso caracterizado por la modalidad de acanto que documenta y que nos hace pensar en fórmulas estrictamente bizantinas. Tanto los folíolos como los ojales son similares a los empleados en un conjunto de capiteles mencionados varias veces en este blog. Obviamente, me refiero a las piezas de Wamba y Toledo.Tanto los folíolos alargados como los ojales hacen pensar en fórmulas de esa naturaleza documentadas con profusión en Kairuán, Roma, Atenas y, sobre todo Bizancio.

Fragmento GRAL04
En principio y desde la escasa capacidad documental del fragmento, no deberíamos descartar en principio, que hubiera formado parte de un friso similar al documentado en Alcácer dio Sal. Si así fuera, deberíamos retrasar su cronología hasta el siglo II, época que parecen indicar los otros fragmentos. Pero en este caso, la posibilidad de que sea un fragmento estrictamente bizantino realizado durante el siglo VI, es, a mi juicio, muy alta.

En suma, todo parece indicar que el Museo Arqueológico Municipal de Sexi —maravilloso nombre— contiene uno de los pocos restos bizantinos documentados en la costa mediterránes. Y en este punto, comprenderá el lector que me muerda la lengua y de por finalizada una entrada que podría ser un poco más larga...

No hay comentarios:

Publicar un comentario