jueves, 27 de noviembre de 2014

10 euros por un rollo


3 comentarios:

  1. Esto da mucho que pensar. Analíticamente, se invierten algunas pautas de conducta. Normalmente cuando un extraño se dirige a nosotros es para pedirnos algo, información, dinero, tabaco... En este caso por un lado no se nos acercan, sino que nos invitan a acercarnos, y no para pedirnos algo, sino para dárnoslo. Finalmente, las confesiones del propio dolor y la empatía de quienes acceden les impide aceptar el dinero. Pero lo que más me hace pensar es que finalmente tanto uno como otro disfrutan del compartir, del comunicarse, de la fraternidad, del sentir al otro como a un semejante. A través de nuestros hábitos sociales en la calle ese compartir rara vez tiene lugar.
    Nana W.

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  2. Esto si es creatividad. Buena iniciativa

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