Según recogen los "medios", el asunto "colección de Carmen Cervera" no se ha resuelto y las obras continuarán en "cesión gratuita" durante un año más... La baronesa había cedido sus 240 obras, según ella misma valoradas entre 600 y 800 millones de euros, para ser expuestas gratuitamente durante once años, junto con las que fueron de sus esposo. El préstamo, que finalizaba el pasado 12 de febrero, debería haber culminado en un acuerdo de venta por el importe estimado por ella misma. Como no llegaron a un acuerdo, surgió una opción nueva: alquilar la colección por 25 años más...
Las negociaciones sufrieron una alteración importante, según dicen, por la indiscreción de la ministra, quien comentó ante periodistas que existía mucha diferencia entre la propuesta del ministerio y las exigencias de la baronesa. Ésta respondió ofreciendo ceder gratuitamente la colección durante un año más...
Continuaron las negociaciones sin que los representantes de las partes llegaran a puerto alguno...
La Cadena Ser lo explica en los siguientes términos:
"Se prorroga por un año el préstamo de la colección Thyssen al Estado. La ministra ha anunciado el acuerdo en unas declaraciones a los periodistas junto a la baronesa Thyssen. Estas negociaciones, que han discurrido con discreción entre los abogados del Estado y de la baronesa Thyssen, han incluido encuentros entre Carmen Cervera y la ministra de cultura, Ángeles González-Sinde.
La baronesa Thyssen cedió en 2000 al Estado español su colección privada, compuesta por 240 obras valoradas entre 600 y 800 millones de euros, para su exposición en el museo Thyssen-Bornemisza de forma gratuita durante once años.
El préstamo concluía el 12 de febrero de 2011, aunque las partes acordaron prorrogar las negociaciones para asegurar la continuación de la colección en España, primero hasta final de mes y después seis semanas más".
Otras fuentes mencionan el disgusto de la baronesa cuando fue preguntada por las contrapartidas...
¿Cesión gratuita? ¿Negociaciones discretas?
Ventajas de ser analfabeto... Si no hemos leído el Lazarillo, seguramente ignoremos la anécdota de las uvas y el ciego y qué se esconde en los lugares oscuros cuando se entregan duros a peseta: el timo del "toco mocho".
Una ministra de cultura que desatiende sus obligaciones respecto del interés general, que ocupa su tiempo en defender los beneficios de los amigos y las grandes corporaciones y de la Iglesia... determina un contexto sumamente difuso.
¿Tita Cervera presta gratuitamente sus obras durante once años y uno más? ¿Se ha convertido en diletante?
Nos toman por gilipollas.
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