sábado, 11 de agosto de 2018

Capiteles del Museo-Romano Germánico de Colonia

Seguramente, el visitante poco informado valore muy negativamente el edificio que anexo a la muy celebrada catedral, enturbia su contemplación. Y sin embargo, existen razones objetivas poderosas para que esa zona de Colonia haya merecido un tratamiento arquitectónico especial, dado que en el subsuelo aparecieron importantes restos arqueológicos que hoy están perfectamente integrados en el actual museo.
El proyecto, que culminó en 1974, está concebido para realzar los restos de una villa del siglo III donde apareció un mosaico de tema dionisíaco. Al preceder, las autoridades alemanas han decidido cerrarlo para proceder a una reorganización de los fondos en un proyecto que se prevé largo y, probablemente, costoso. Y es que la concepción del museo, aunque tuvo gran repercusión en su día, resultó incompatible con la acumulación de restos derivados de una labor arqueológica particularmente intensa. En este blog hemos contemplado el caso de algún museo demasiado condicionado por el planteamiento inicial... Entiendo que a estas aturas debería estar claro que, con independencia de la repercusión social que, en un momento dado, tengan los museos, es importante que sen concebidos con la posibilidad de su ampliación.
Confiemos en que, en este caso, el resultado final engrandezca un planteamiento que, desde el momento de su inauguración, marcó una referencia importante en algunos de sus planteamientos.


Los capiteles

Están expuestos en dos conjuntos de cualidades museográficas diferentes: los integrados en la instalación general y los que se ofrecen como si estuvieran en una especia de almacén secundario, que se puede ver desde el exterior del museo, con indicaciones descriptivas demasiado sucintas y, en general, obvias. A lo mejor digo una excentrididad, pero tengo la sensación de que, al menos desde los tiempos de Kähler, el énfasis que "la arqueología alemana" pone en las descripciones de los restos arqueológicos y, que por lo general, seguimos todos de un modo más o menos sumiso, se ha convertido en un anacronismo cada vez menos justificable. Cuando la fotografía ya es un elemento trivial, no sé que sentido tiene que en la cartela de un museo digan que un fragmento de capitel con restos de volutas es "un fragmento de capitel con restos de volutas", si la descripción no entra a destacar los elementos que le pueden otorgar relevancia arqueológica. Y ciertamente, en el Museo Romano-Germánico de Colonia son demasiado frecuentes las cartelas con enunciados de ese tipo.
En todo caso, ha de ser destacada la valoración que sus conservadores hacen de una amplia colección de restos, suficiente para componer una imagen nítida de como se entendió la ornamentación arquitectónica entre los siglos I y IV en esta región limítrofe del Imperio Romano.

Capiteles corintios

CMRG001
El CMRG001 es otro de los capiteles que permanecen dentro de las pautas imperiales, aunque se manifiestan algunos rasgos de la zona; entre ellos, la escasa entidad plástica de las volutas; aunque sólo se han conservado las internas, se advierte cómo el ornato vegetal las cubre casi por completo. 
Siglo II.

CMRG006
Los CMRG006, CMRG007 y CMRG005 son similares al anterior. Siglo II.

CMRG007
CMRG005

CMRG004
El CMRG04, aunque conserva casi todas las cualidades del orden en su formulación imperial, ofrece algunos detalles significativos, como las palmas de de siete hojas colocadas en los óvalos que definen los arranques del cáliz junto a los caulículos. Hemos visto detalles de "barroquización" comparables en la península Ibérica; por ejemplo, en Segóbriga, en capiteles del siglo II.

CUMU017. Museo de Cuenca, procede de Segóbriga.
El CMRG002 posee un tipo de "acanto", que pudiera remitirnos a momentos relativamente antiguos: el monumento funerario de L. Poblicius contaba con fórmulas similares; sin embargo, el escaso relieve de los elementos del cuerpo superior retrasan su cronología, al menos, hasta el siglo II.

CMRG002


CMRG008
El CMRG008 es el remate de una columna dedicada a Júpiter, que los conservadores del museo sitúan en los alrededores del año 200. Aunque está muy erosionada, el conjunto permite contemplar un capitel de estructura comparable a algunos de los mencionados anteriormente. Ofrece una corona inferior de hojas de diseño casi inapreciable, que pueden haber sido recortadas para acoplarlas a la instalación actual y de ese modo, otorgar continuidad al ornato del fuste.
El resultado de esa "reconstrucción" convierte al capitel en un ejemplar singular, con una única corona de hojas de altura excepcional y ornato más propio de las variedades corintizantes de los siglos I y II.
En el cuerpo superior se aprecia un conjunto en el que dominan los revestimientos "vegetales" (el cáliz) sobre las volutas, prácticamente desaparecidas. Sin embargo, la existencia del conjunto axial impide que podamos hablar en este caso de un capitel corintizante.
Aunque, a pesar del "perfecto" encaje entre fuste y capitel, no sé si la reconstrucción de la columna es oportuna, la cronología indicada en la cartela coincide con las cualidades del cuerpo superior del capitel, que pudo ser realizado a finales del siglo II.

CMRG003
En la cartela lo describen como capitel  "con tres coronas de hojas" ("Säulenbekronung mit drei Reihen dicht stehender, kleinteiling ausgearbeiteter Blätter"). En realidad se trata de un capitel corintio, que ha perdido casi por completo la referencia a las volutas por su grado de erosión y porque responde a una modalidad en la que se impone el valor plástico de "lo vegetal" sobre "lo geométrico"; el desarrollo del cáliz ha adquirido tal entidad que "parece" un tercer orden hojas. Estructuralmente es similar a los CMRG001, CMRG006, CMRG007, etc.
No obstante, es obvio que el ornato vegetal presenta rasgos de mayor evolución y de menor habilidad en el ejercicio de la talla, que vuelve a plantear el problema tantas veces indicado. En este caso concreto, me inclino por situarlo en los alrededores del año 200.

Los fragmentos CMRG009, CMRG010 Y CMRG011, por raznes expuestas muchas veces, podrían situarse entre los siglos II y III.

CMRG009

CMRG010

CMRG011
Si no fuera porque en el museo consideran al CMRG012 como "capitel corintio típico de la región renana", debiera aparecer en el grupo de los "capiteles anómalos". Está muy erosionado superficialmente y consta de dos coronas de hojas distribución anómala en el segundo nivel, donde se aprecia una alusión muy evolucionada del conjunto caulículos-volutas; éstas se enroscan en dirección contraria a la convencional. En la cartela se le describe en los siguientes términos:  "Kapitell von einer Wandvorlage.  Diese Säulenbekrönung ist nur auf zwei Seiten ausgearbeitet: Demnach schmücke sie eine Wandsäule, die in der Ecke eines Raumen stand. Nachdem Aufbau der Blätter ist das Kapitell eine charakteristich rheinische Ausprägung der korinthischen Ordnung
Aunque se enfatiza el carácter "renano" del capitel, se aproxima bastante a fórmulas vistas en este blog y, muy especialmente, a los "de pencas" de la península Ibérica. Las trepanaciones que ayudan a definir hojas lanceoladas de diseño tosco, podrían relacionarse con el influjo oriental de los siglos II y III.
Frente al análisis que se podría realizar en Hispania, en Colonia deberíamos tener en cuenta que la moldura del astrágalo no puede relacionarse con una hipotética influencia oriental, dado que es una circunstancia común, como refleja la propia colección del museo.
Hacia el año 400.

CMRG012

OMAR009, Capitel del Museo Arqueológico de Oviedo

Capiteles corintios de pilastra

En general, los capiteles de pilastra responden a fórmulas similares a las mencionadas a propósito de los capiteles de columnas, con la salvedad de que, en aquellos, se aprecian con mayor claridad los rasgos locales.


CMRG018
El CMRG018 es un capitel de pilastra con dos coronas de hojas, con todos los elementos del orden, condicionados por la naturaleza de la pilastra. A destacar, como rasgo significativo, la escasa entidad de las volutas, prácticamente cubiertas por el cáliz, que hemos contemplado en las piezas de los párrafos anteriores, y la naturaleza de los acantos.
Siglo II.

Los CMRG016, CMRG013 y CMRG015 rpiten fórmulas ya mencionadas en Tréveris, con acantos relativamente alejados de las fórmulas helenísticas más repetidas, "voluntad tapizante" sobrevaloración del cáliz sobre las volutas, etc. Frente a lo que sucede en piezas más antiguas, el kalathos se ve desnaturalizado pero enfatizado mediante un labio bastante grueso.
Siglo II.

CMRG016

CMRG013

CMRG015
El fragmento CMRG20, a pesar de su estado de erosión, indica una concepción de la estructura del orden menos evolucionada que la de las pilastras anteriores, tal y como documenta el conjunto axial. En todo caso, lo poco que se puede evaluar no permite demasiada precisión en catalogación.
Siglo II.

CMRG020
El fragmento CMRG022 apenas permite valorar los acantos, que podrían situarnos en la primera mitad del siglo II.

CMRG022

CMRG017
El CMRG017 es un capitel de pilastra en el que destacan varias circunstancias relevantes: el tipo de acanto de la corona de hojas, sumamente esquemático, el hiperdesarrollo del cáliz, que prácticamente cubre las volutas en su totalidad, el vuelo de las volutas interiores, mayor de lo que suele ser habitual en las formas imperiales uniformadas y la entidad de los florones, exageradamente grandes.
Siglo II.

CMRG019
El CMRG019 ofrece mayor proximidad a las fórmulas imperiales, aunque prácticamente han desaparecido las alusiones a las volutas. Hacia el año 200.


CMRG018
El CMRG18 es un fragmento de capitel de pilastra en el que tampoco percibe alusión alguna a las volutas; ello, el carácter de la talla, el tipo de acanto y la inexistencia del labio del kalathos permiten adelantar su cronología respecto del anterior. Siglos II-III.

CMRG021
Los CMRG021 y CMRG023 imponen dudas sobre si deberíamos considerarlos "corintios" o "corintizantes". Por evitar el pecado anunciado solemnemente por Tomás de Iriarte en su conocida fábula, dejaré constancia de esa duda pero sin olvidar que esa invasión de un motivo vegetal de la zona tradicionalmente ocupada por los caulículos, los cálices y las volutas parece ser el desenlace de un proceso evolutivo apuntado por algunas de las piezas aquí mencionadas. En todo caso, el carácter de los acantos y la manera de ornamentar los frentes del ábaco imponen prudencia a la hora de adelantar su cronología. También aquí se manifiesta cierta proximidad a lo acreditado por el monumento funerario de L. Poblicius, cuyo capitel corintio de coronación es un punto menos evolucionado que éstos.
Siglo II (o, tal vez, siglo I).

CMRG023
En el almacén que se ofrece al público desde el exterior hay un fragmento de capitel (CMRG038) tremendamente erosionado, que parece seguir la tradición del orden corintio: únicamente se aprecian el diseño de las volutas, un ábaco estrecho y poco más. No obstante, lo que se percibe permite valorarlo como uno de los capiteles menos evolucionados y, en consecuencia, con más probabilidades de ser "antiguo".
Siglos I-II.

CMRG038

Capiteles de pilastra corintizantes

CMRG025
Desde o que conozco, se diría que las variedades corintizantes tuvieron poco éxto en esta parte limítrofe del Imperio Romano. El Museo de Colonia ofrece dos piezas de esta variedad, que seguramente responden a momentos relativamente separados en el tiempo.
El CMRG025, que en la cartela del museo se valora únicamente con criterio descriptivo, guarda cierta relación con fórmulas documentadas en Pomepeya, de modo que ello podría apuntar al siglo I. El fragmento CMRG024, de la "familia liriforme" y de concepción más barroca, debería situarse en el siglo II, aunque el estado de erosión superficial impide valorarlo con precisión.

CMRG024
Capiteles compuestos


Entre las salas y los "almacenes accesibles", el museo de Colonica ofrece varios capiteles compuestos, que he ordenado con criterio similar al aplicado a los corintios, aunque en este caso y por evitar reiteraciones, procuraré ser breve.
Desde la referencia definida por el mausoleo de L. Poblicus, parece obvio que los que respondan a modalidades estructurales semejantes deberían situarse en los alrededores del año 40 d.C. Ese es el caso de los CMRG026, CMERG029, CMRG027, CMRG028  y CMRG030, que he ordenado según lo que parece ser un cierto proceso evolutivo. Y lo expreso con dudas porque salvo en el caso del CMRG026 y el CMRG027 no se aprecian detalles substanciales como el carácter del ábaco y menos aún, el arranque de las volutas angulares.
Adviértase que sólo uno, el CMRG029 tiene dos coronas de hojas en el cesto; los demás cuentan con una fila de acantos y "fondo" de palmas o cañas.
Siglos I-II.

CMRG026


CMRG029

CMRG027
CMRG028


CMRG030
El CMRG031 parece ser el más evolucionado del conjunto, aunque su erosión superficial impide mayores precisiones.
Siglo II.


CMRG031
Capiteles compuestos de pilastra y de relieve ornamental 

Responden a los mismos fenómenos tipológicos y evolutivos mencionados.

CMRG032

CMRG033

CMRG034


CMRG035

CMRG036

CMRG037
Capitel jónico

CMRG042
En realidad, no es un capitel jónico en sentido estricto, sino una especie de "fórmula de compromiso" entre el orden jónico y el orden compuesto, en el que se mantiene parte del cuerpo superior según modalidad de aquel. Hemos visto capiteles de estructura similar de vez en cuando. Entre ellos deseo destacar en este caso uno de Valencia, que nos ayudaría a comparar la relevancia de las aportaciones locales.
Aunque está muy erosionado, parece responder a fórmulas descritas en las líneas anteriores.
Siglo II.

Capiteles "anómalos"

En el espacio expositivo, el museo ofrece únicamente dos capiteles que pudiéramos considerar "muy evolucionados": el CMRG039 y el CMRG40, difícil de valorar, dado su penoso estado de conservación. 
El primero se ofrece junto con otros dos para hacer notar las "variaciones estilísticas" de unos capiteles a otros. Francamente, no creo que hoy tenga mucho sentido esta manera de mostrar las piezas, sobre todo, si no se tiene capacidad para contextualizarlas. Hablar de "estilos" en contexto arqueológico me parece un anacronismo, que sin embargo, he documentado en unos cuantos museos...
Aunque pudiera integrarse en el grupo de "capiteles corintios renanos" (ver pieza CRMG012), en realidad es difícil decidirse sobre si deriva del orden compuesto o del corintio, dado el alejamiento que substancias sus elementos respecto de las dos tradiciones. Está articulado en dos zonas: un cesto con astrágalo y dos coronas de hojas de diseño grosero y un cuerpo superior en el que existe un ornato que recuerda las volutas del orden compuesto con remates en espiral asimétricos. Es curioso y destacable que se mantenga un motivo que recuerda los conjuntos axiales y la entidad del florón, En la parte superior se aprecia un ábaco estrecho de escasa articulación. Si este capitel hubiera aparecido en el norte de la península Ibérica, debería situarlo en los alrededores del siglo IX.  En el ambiente franco-alemán, con los condicionantes que impone el "Renacimiento Carolingio", acaso debiera retrasarse su cronología considerablemente...
Más allá de hipótesis forzadas, la concepción del capitel recuerda otros del Museo Arqueológico de Zamora, de ejecución más depurada y algunos aparecidos en contexto arqueológico romano, que comentaré en otra entrada.
Alrededores del año 400.

CMRG039
CMRG040

Para finalizar

El museo arqueológico de Colonia cuenta con una importante colección de restos de ornamentación arquitectónica, que ilustra con matices peculiares el proceso de romanización de los alrededores del Rin. Al parecer, desde el siglo I los tallistas que trabajaron en Colonia y sus alrededores, interpretaron las fórmulas imperiales con cierta relajación, sin que se aprecien con claridad los cambios que fueron aplicando los talleres oficiales con el paso de los años. No es fácil encontrar reflejos del gran influjo oriental del siglo II y, desde lo que ofrecen en las salas, no existe ningún capitel corintio asiático ni de claro influjo bizantino; es más, las variedades corintizantes, que materializan algunos elementos de profundo sentido griego, son muy escasos. En ese sentido, es tentador decir que las piezas de esta zona son "más occidentales" que las del oeste de la península Ibérica. Y tengo la sensación de que la observación, emitida en esos términos, pudiera inducir a "engaño" o "manipulación histórica" si no fuera porque es notorio como se articularon los modelos culturales a partir de la crisis del Mundo Antiguo. De todas formas, recuerde el lector que esa zona, los alrededores del Rin, tras la caída de Roma, se convirtió en uno de los lugares fundamentales de lo que acabó siendo la "Europa medieval" —si, insisto, es históricamente lícito expresarse en esos términos.


En todo caso y desde los restos ofrecidos por el museo de Colonia, en asuntos de ornamentación arquitectónica, esta zona permaneció relativamente al margen de las "modas" que afectaron a otras áreas del Imperio (sur de Francia, península Ibérica, norte de África, Constantinopla, Egipto, Siria, etc.), al menos hasta la aparición del cristianismo. Dicho de otro modo: desde lo que indican los capiteles, la zona del Rin fue una área relativamente marginal a la dinámica global entre los siglos I y IV; allí permanecieron casi inalterables las fórmulas y los modelos que se emplearon durante el primer siglo de nuestra era. Únicamente en los alrededores del año 400 se aprecia un giro hacia la dinámica común de empobrecimiento técnico y cultural, que justificaría la aparición de piezas "muy degeneradas", propias de un ambiente cultural que anticipa los siglos oscuros del medievo. Aunque es relativamente fácil encontrar piezas comparables a las "renanas" en otros lugares del mundo romano, no creo que se deban establecer otras relaciones culturales que las de la convergencia asociada a circunstancias similares.
Aunque confieso que es maquiavélicamente tentador deducir de esa proximidad alguna relación cultural directa, sobre todo, teniendo en cuenta que por esos años algunas tribus germánicas ya se estaban moviendo hacia el sur...
Sea como fuere, entiendo que la "categoría" de los "capiteles corintios renanos", que se reserva a las piezas mencionadas, sería más adecuada para nombrar la variedad local de ese orden seguida por la mayor parte de los conservados en el Museo-Romano Germánico de Colonia. La peculiar manera de entender el ornato del cuerpo superior, al contrario de cómo lo interpretaron los tallistas de Volubilis, enfatizando la parte "vegetal" sobre la geométrica, lo justificaría perfectamente.

lunes, 6 de agosto de 2018

¿Por qué "la gente" no acude a ciertos museos?

En ocasiones los medios de comunicación son especialmente divertidos. Ayer leí una "noticia" que me agitó las meninges durante un buen rato; tanto que fui incapaz de redactar unas líneas...
Hoy, más sosegado, he decidido recoger lo que me parece más relevante del artículo firmado por Ángel Villarino, que comenzaba hablando del Museo Nacional de la Energía,de Ponferrada, ese lugar del que depende "uno de los pueblos más hermosos de España", al que, en la actualidad, no se puede ir si no se dispone de un vehículo todoterreno y ganas de arriesgar la vida. Se emplearon 100 millones de euros en un museo que no le interesa prácticamente a nadie, mientras se desatendían asuntos tan elementales como el acceso a un lugar especialmente hermoso y singular, que está en penuria desde cuando Gómez-Moreno, lo visitaba en burro.

(...)
"El director general de Bellas Artes, Román Fernández-Baca, admite que se pueda haber generado “una especie de inflación de museos en algunos casos” fuera del ámbito estatal. En su experiencia, mantener vivo cualquier ecosistema museístico requiere tres factores. “Lo primero es tener un relato, que el discurso del programa los mantenga vivos”. Lo segundo, asegura, es “un plan de infraestructuras”, dotado de presupuesto, para poder acometer modernizaciones como las del Antropológico de Madrid (60 millones), la del Museo de Málaga (40 millones), o la reciente reapertura del Museo de Menorca. “El tercer factor a tener en cuenta es estudiar la demanda del público y esforzarse por llegar a más gente haciendo una labor de captación a través de programas específicos”.
Uno de los objetivos del ministerio para esta legislatura es precisamente atraer hasta los museos a los estratos sociales que no están acudiendo. El retrato robot del público de museos en España es una mujer de cuarenta y tantos años. Y en general, acude más la gente joven y con estudios. Por el contrario, los sectores sociales que menos atraídos se sienten son los adolescentes varones, las familias -los niños apenas acuden fuera de los programas escolares-, las personas mayores de 65 años y los grupos excluidos por razones económicas o por discapacidades. Para atraerlos, el ministerio planea organizar paquetes de actividades muy concretas y con un 'target' definido -desde conciertos a programas formativos-, "tirando de imaginación y trabajo comunitario". Hay ejemplos recientes que están funcionando, como el del Museo Nacional de Escultura de Valladolid, en el que a los alumnos en visita escolar se les anima a volver con su padre -no con su madre- y se les proporciona entrada gratuita si lo hacen."



Tener un relato, un plan de infraestructuras y tener en cuenta la demanda del público y esforzarse por llegar a más gente haciendo una labor de captación a través de programas específicos... Francamente, por ese camino lo tenemos crudo.
Para completar la charada, el autor se ha dirigido a una persona que conoce el asunto "desde dentro" y enseguida ha hecho notar que el número de visitantes a un museo no debería ser un objetivo prioritario, dado que existen museos de cualidades y circunstancias muy variadas:

“Hay una tendencia a aplicar a los museos criterios que no son de nuestro campo sino de la publicidad, el marketing, el entretenimiento y las industrias culturales”, dice Oliveira. “Y es una perversión porque la función del museo es contribuir al conocimiento del mundo en el que vivimos. Un museo funciona bien si cumple con esa misión multifacética y, además, consigue que cada vez más amplias capas de la ciudadanía hagan uso del derecho constitucional y de servicio público que son los museos”.

¿Conocimiento del mundo en que vivimos? Entre las viejas paredes de aquel pintoresco hospital no se me habría ocurrido función tan grandilocuente. Deberían ponerlo en letras de bronce dorando, por supuesto, en latín:

 "Esta institución sirve para que quien cruce sus puertas conozca mejor el mundo que le rodea"

Lo más divertido del caso: ¿no se le ha ocurrido a nadie invertir el asunto y plantearse por qué a la inmensa mayoría de la población no le interesan los museos y, en especial, ciertos museos? A lo mejor —digo yo— esa inmensa mayoría no está de acuerdo en que los museos sean lugares apropiados o simplemente útiles, para contribuir a conocer el mundo en que vivimos; a lo mejor no les interesan en absoluto los discursos ni los relatos que ofrecen. A lo peor el problema está en parámetros alejados de las actuales prácticas museísticas... y, en especial, de ciertas maneras de entender la función del museo y el reparto de los recursos del Estado.
Pero querido lector, tú que, más allá de su literalidad, sabes por dónde va este comentario necesariamente lacónico —también en este caso podría redactar una "versión extendida"—, no debes preocuparte, porque el nuevo director general de Bellas Artes tiene un target...

sábado, 4 de agosto de 2018

Capiteles del Rheinisches Landesmuseum de Tréveris

El Rheinisches Landesmuseum es una institución de visita agradable, recientemente premiado por ello, que se recorre con facilidad, tal vez, porque la fragmentación expositiva, la iluminación y el "controlado" objetivo pedagógico, hacen más liviano el paseo. 




Para quien no desee darse una vuelta por Internet, me limitaré a indicar que "teóricamente" Tréveris fue fundada en tiempos de Augusto con el nombre de fue Augusta Treverorum y que fue un enclave muy relevante en tiempos medievales y aún en años posteriores. Cuenta con uno de los conjuntos arqueológicos más relevantes de esa zona de Europa y entre sus "hijos" debe citarse al repudiado Carlos Marx, relativamente reivindicado en la actualidad por ciertos sectores entre los que no se cuentan los más activos en asuntos de sociología política, donde sigue siendo un personaje tabú. Precisamente, por estas fechas, el Rheinisches Landesmuseum le dedica una exposición para celebrar el 200 aniversario de su nacimiento: KARL MARX (1818–1883) LEBEN. WERK. ZEIT.. ¿Qué sentido tiene una exposición dedicada a Carlos Marx en un museo cuyo contenido mayoritario es arqueológico? Ha de ser porque desde Hegel los alemanes son un poco "raros": para sorpresa de ortodoxos, algunos aún "creen" que el materialismo histórico es una herramienta útil... ¡Con lo bella  que es la Historia entendida como sucesión de reyes, batallas y estilos artísticos!

Barco del Vino,  aparecido en Neumagen

El evento ha de contemplarse en un "programa" de relativa amplitud, que incluía la integración en la retícula urbana de una escultura en bronce realizada por Wu Weishan  y regalada por el gobierno chino. Según informaron los medios, la obra fue aceptada por el ayuntamiento de Tréveris con 42 votos a favor y 7 en contra. La decisión democrática levantó ampollas en los sectores que siguen con el mantra de "la falta de derechos humanos" en China y por supuesto, entre quienes creen que la escultura es un engendro estético. Si la hubiera firmado Ai Weiwei...
Al margen de las exposiciones temporales, el museo muestra una interesante colección de restos de época romana, que informan perfectamente sobre el grado de romanización que experimentó una de las ciudades más antiguas de Alemania y con mayores implicaciones simbólicas desde ciertos planteamientos ideológicos... 
Entre los restos ofrecidos destacan algunos mosaicos, unos cuantos monumentos funerarios (entre ellos resplandece, por su apreciación popular, el "Barco del Vino" y, por supuesto, una interesante colección de capiteles, que ofrezco a continuación ordenados según un criterio emanado de sus propias cualidades. 

Capiteles corintios

TRLM001
Uno de los capiteles más antiguos de la colección (TRLM001) está muy fracturado, ha perdido las volutas exteriores apenas permite hacerse una idea del ábaco. Procede del porche de la basílica de Tréveris y está catalogado en el siglo I.
El tipo de acanto, las anulaciones triangulares y lo que ha permanecido del cuerpo superior nos acerca a la época de Trajano. Finales del siglo I.

TRLM002
El TRLM002 procede de las termas y en la cartela del museo lo sitúan en el año 140. A destacar la fusión con el astrágalo, la tendencia al ornato tapizante y la irregular configuración del kalathos en la parte superior aunque está perfectamente marcado el labio.


Capiteles derivados del orden corintio de monumentos funerarios y chapados.

Una de las zonas más interesantes del museo está dedicada a los restos de sepùlcros, que se ofrecen al visitante con un planteamiento pedagógico mesurado y, en todo caso, espectacular. En algunos de ellos se han empleado capiteles que ilustran la voluntad de concebir estos monumentos con una cierta sofisticación arquitectónica, por supuesto, dentro de las limitaciones que impone la escala. Sea como fuere, entiendo que esta manera de concebir la "ornamentación arquitectónica", que también encontramos en los sarcófagos y las representaciones de objetos muebles, requiere un capitulo a parte en el estudio de esa faceta que, tal vez, pudiera ayudar a entender un poco mejor la evolución de los capiteles en la Tardoantigüedad y en la Alta Edad Media.

TRLM23

Los restos de una tumba torre realizada a finales del siglo I (70-80), que fue reutilizada varias veces (en el siglo II y en el IV), contienen dos capiteles (TRLM23 y TRLM24), que ilustran una curiosa variante del "orden corintio". Aunque su concepción hace pensar en la la tumba de Lucius Publicius, el uso del orden corintio impone un cambio de cierta entidad que, sin embargo, cumple para completar el universo estético de la misma época.
A destacar que al convertir el cesto en un sólido más próximo al prisma que al tronco de pirámide, quedan minusvalorados casi todos los elementos que, en el orden corintio, se presentaban adheridos a él. La superficie del "cesto" aparece tapizada de ornamentación que, sin embargo, no se aleja de la organización estructural de los capiteles corintios. Aunque algunos elementos casi pierden su naturaleza original (por ejemplo, las volutas), a mi juicio, la configuración no se aleja tanto de los prototipos imperiales como para podamos hablar de fórmulas corintizantes.
A destacar también la concepción de los "acantos", mediante agrupaciones de hojas que se acercan más a las de los robles que a las de los elementos mediterráneos.

TRLM43
El fragmento procedente de las Termas de Tréveris (TRLM43), fechado en el año 140, ofrece una composición muy depurada, que hace pensar en fórmulas propias de la estética imperial. Adviértase que la voluntad tapizante propia de la estética local, que se deja sentir en la expansión de las hojas, que casi ocultan los caulículos, no se manifiesta en la zona comprendida entre las volutas y las proximidades del arranque del conjunto axial.
Documenta magníficamente cómo se manifestó en Tréveris el influjo oriental de los tiempos de Adriano y los años posteriores. Supongo que con el desarrollo de los trabajos arqueológicos aparecerán más restos de este tipo...

La reconstrucción del Monumento de Ifigenia y Edipo, fechado en el año 160, ofrece dos capitelillos en situación irregular de conservación (uno de ellos casi se ha perdido por completo) (TRLM 28 Y TRLM29). Es interesante comparalo con el anterior para advertir la existencia de elementos afines o muy próximos, como la manera de marcar el cáliz de las volutas mediante arcos de circunferencia que dejan en el centro una especie de "flor con perfil de albanega" que nos recuerda la tendencia de los talleres locales a eludir los huecos.

TRLM28
El "Sepulcro de Padres con Niño", procedente de Neumagen, población próxima a Tréveris, está fechado en el año 220 y contiene unos curiosos capiteles de pilastra con una sola corona de hojas y volutas en V. Es digno de ser destacada la manera de resolver la zona superior, otorgando continuidad a un ábaco de gran espesor, de modo que en la unión con la reinterpretación del "cesto" (troncopiramidal) se consigue un resultado que hace pensar en fórmulas relativamente tardías, de concepción estructural próxima al uso de cimacios.
No creo que en este caso se pueda hablar de influencia bizantina, aunque cabría interpretar la concepción del ábaco y la tipología estructural en ese sentido. Es más probable que se trate del resultado de una evolución endógena.

TRLM32

TRLM33
En la coronación del monumento hay un capitel corintio (TRLM41) muy estropeado pero de concepción estructural más convencional: cuenta con volutas interiores y exteriores y los acantos repiten fórmulas menos evolucionadas. La manera de interpretar el ábaco, con moldura superior fina, y el labio del kalathos, así como las modalidades de acantos, permiten situarle en el siglo II.

TRLM41

Otros capiteles derivados del orden corintio

En la sala que define la transición entre lo antiguo y lo medieval está el TRLM15, procedente de Tréveris (Pallien), que estructuralmente está organizado mediante collarino liso, una corona de hojas, cuerpo superior con volutas en V, kalathos perfectamente marcado y ornado mediante incisiones paralelas, eje axial de gran desarrollo y ábaco de concavidad acusada, gran espesor y florón de ornato estilizado.
A destacar la carencia de cáliz y la concepción de la hojas de perfil festoneado, con folíolos alargados y hojas muy marcados; recuerdan fórmulas conocidas en el norte de la península Ibérica.
En la cartela lo adjudican al siglo IX entre interrogaciones.
Desde lo que informan algunos de los capiteles anteriores del "Sepulcro de Padres con Niño", parece obvio que esta modalidad estructural no es extraña a las tradiciones locales. Lo más "anómalo" está en el diseño del conjunto axial y en los "suplementos" que unen las volutas con las hojas angulares.
Pero no creo que ello sea suficiente para situar este capitel en una época tan tardía. De nuevo, reitero la posibilidad de que se trate de un capitel realizado en época temprana, al amparo de corrientes relativamente ajenas a los paradigmas imperiales.
Alrededores del año 300.

TRLM15
El TRML16, hallado en Tréveris, participa de una problemática relativamente similiar a la del anterior, aunque sus cualidades estructurales son diferentes. Tal parece que en Alemania los capiteles "raros" se relacionan con la Alta Edad Media, sin calibrar que con ello se adjudica a esa época una capacidad creativa excepcional.
Carece del cesto recubierto de hojas que caracteriza a los capiteles corintios y en su lugar presenta un collarino desmesurado tanto por la altura como por la anchura. Sin embargo, posee un curioso cáliz, asimismo de tamaño grande, con palmetas de manifiesto sentido helenístico, que se remata con vueltas de hoja en las esquinas en la zona del conjunto axial, que ha sido parcialmente sustituido por dicha vuelta de hoja, dado que conserva en la parte inferior una especie de espata comparable a la que poseen algunos capitelillos del mismo museo (TRLM28 y TRLM29).
Entre lo más destacable del capitel: la manera de interpretar las volutas interiores, que configuran una ménsula donde se poya la cartela del ábaco y la concepción del kalathos en la parte superior, con labio de grosor desmesurado y forma cilíndrica pero de radio muy inferior al definido por la base del capitel.

TRLM16
También merece ser destacado el tipo de ábaco, inciso en los frentes para definir una moldura sutil por la parte superio, con radio de curvatura cercano al de los capiteles de los siglos I y II, y cruz de cartelas de tanta profundidad que sobrepasa el sólido definido por la parte superior del falso kalathos. Posee un hueco en el centro que, posiblemente fuera realizado para alojar una grapa metálica.
Tanto el tratamiento de la piedra como las herramientas documentadas sugieren que fue realizado en un momento histórico que aún no había sufrido las penurias que impuso el cambio de estructura comercial y económica.
Aunque en la cartela del museo sitúan su realización hipotética —también en este caso han empleado la interrogación— entre los siglos VII y VIII, es probable que fuera realizado mucho antes pero no con las funciones estructurales de los capiteles más comunes; en ese sentido se me ocurre que pudo cumplir funciones como soporte de un pedestal sobre el que, a su vez, se pudo colocar una escultura de cuya naturaleza nada sabemos.
En todo caso, el capitel ofrece una interpretación de los elementos ornamentales no muy alejada del repertorio helenístico, que sugiere lo que hizo Borromini con el repertorio renacentista.
Siglos II-IV.

TRLM16, detalle del ábaco

Capiteles compuestos

El TRLM08 es un capitel compuesto procedente de la Basílica, que ha perdido los discos angulares y ofrece un reparto estructural de los elementos de cuerpo superior anómalo; destaca especialmente el motivo seriado que separa al cesto del equino. Sin embargo, el ornato que lo recubre, el diseño del ábaco y el arranque de las volutas angulares, lo acerca a modelos tempranos.
Aunque la cartela del museo lo sitúa a mediados del siglo IV, es posible que fuera realizado con anterioridad. Siglos II-III.

TRML08

TRLM03
Se ofrece al visitante un conjunto de cuatro columnas con dintel, con sus respectivos capiteles, procedente de Franzenheim (cerca de Tréveris). La cartela sitúa el conjunto a mediados del siglo IV. Como ya me he manifestado en varias ocasiones sobre este tipo de capiteles, me limitaré a indicar que en éste destaca el reducido espesor del ábaco que, sin embargo, ofrece la concavidad de los primeros siglos. 
A efectos de su catalogación, en este caso, deberíamos tener en cuenta que la estructura de los capiteles compuestos con una corona de hojas está documentada en el monumento de Lucius Poblicius y que el diseño de la parte superior se acerca mucho a ciertos modelos de Pompeya (POMP197). Destacan el arranque de los discos de las volutas, según fórmula relativamente temprana, y el carácter del equino, según modalidad poco evolucionada . Todo ello, unido a unas vueltas de hoja de gran espesor, debería alertar ante la posibilidad de que se trate de un conjunto realizado en época anterior, incluso en los alrededores del año 100.

POMP197
El TRLM07, procedente de la Basílica, ofrece una estructura más evolucionada que la de los de la columnata de Franzenheim, de manera que nos puede servir para ayudar a justificar el comentario anterior. Obsérvese de donde surgen las volutas de los discos angulares y la irregularidad del equino. Dentro de una hechura de manifiesta torpeza, destaca el ornato vegetal, aún muy vinculado a las fórmulas comunes en los alrededores del Rin.
En la cartela del museo lo sitúan en el siglo IV, a mi juicio, con buen criterio.
TRLM07
El TRLM09, aparecido en el Hauptmark de Tréveris está muy erosionado y apenas permite adivinar cómo fue su ornato, seguramente, de hojas-peine, en el cesto y de algo similar en el equino (se adivina un friso de "cañas" con puntas en la parte superior y en la inferior).  También son perceptibles las flores de los discos el borde del equino, marcado tal vez, mediante una moldura sencilla. Lo más evolucionado es el ábaco de escaso espesor que, sin embargo, ofrece una concavidad de cierta entidad.
En la cartela del museo loa tribuyen al siglo IX entre interrogaciónes. Sin embargo, la concepción volumétrica, muy próxima al tronco de cono, debería imponer prudencia y tomar en consideración la posibilidad de que se trate de una obra relativamente temprana, realizada por manos de escasa habilidad. Los alrededores del siglo IV definen una referencia más "razonable" que el siglo IX.

TRML09

El TRLM10 Procede de la Saarstraße de Tréveris y ofrece una estructura derivada del orden compuesto con algunas peculiaridades que han de ser destacadas: en especial, la manera de organizar el cuerpo superior mediante caulículos de los que brotan palmas de cinco hojas lanceoladas. Sobre ellas hay una moldura sogueada que soporta la que une los discos angulares, que culminan en espirales. A su vez, sobre ese nivel se dispuso una plataforma que en realidad es prolongación de un kalathos perfectamente troncocónico; no creo que en este caso se pueda hablar estrictamente de equino. Dicho de otro modo: el capitel está concebido volumétricamente como fusión entre el orden corintio y el compuesto.
El capitel se completa por la parte superior con un ábaco de curvatura comparable a la habitual en los capiteles de los siglos I al III, cuya moldura superior ofrece un remate sogueado.
Por su parte, el cesto está cubierto con hojas de folíolos a 45 º según fórmula que es relativamente común en las series derivadas de los corintizantes y, por supuesto, en ciertas modalidades derivadas de "lo bizantino".
La cartela del museo lo sitúa entre los siglos VII y VIII entre interrogación. No obstante, la falta de referencias bizantinas claras nos sitúa ante un problema mencionado muchas veces en este blog que, de nuevo, nos remite a la posibilidad de que se trate de un variedad local temprana, comparable a las que hemos indicados en otros lugares.
Siglos III-IV.

TRLM10

Capiteles corintizantes

TRLM11
Al parecer, en los alrededores del Rin no se emplearon con frecuencias las modalidades corintizantes. El fragmento TRLM11 procedente del Circo, responde a la variedad liriforme. A destacar remate superior del ábaco, mediante laurea o espeiguilla.
En la cartela lo sitúan en el siglo II.


Capiteles animados


TRLM17

TRLM21
Más allá de algunos capiteles animados,"restaurados" en exceso, pero seguramente con buen tino, el museo ofrece el TRLM21, definido como "Säulenkapitell mit Frauenköpfen" (capitel de pilastra con cabezas femeninas) que, en realidad, no es un capitel en sentido estricto, sino el remate de una pilastra que debía enfatizar lo dispuesto sobre ella. En la parte superior se advierte el arranque de ese elemento.
Merece ser destacado el carácter sumario de la talla, que se pone al servicio de un tratameiento sumamente esquemático en el ornato vegetal y estereotipado en lo animado.
Seguramente debido a su naturaleza, ofrece una especie de "ábaco" decorado con incisiones lineales.
En varias ocasiones hemos visto capiteles de concepción estética comparable, especialmente en Roma y la actual Francia.
El año 300 puede ser, tal y como indica la cartela, una buena referencia para situar su realización.

TRLM22


El TRLM22 es un capitel aparecido en Tréveris (Hermesstrasse), que  anticipa los "de dos zonas" de época bizantina y que define una modalidad que veremos desarrollada también en Hispania, por ejemplo, en el llamado "capitel de los Evangelistas". Si se me permite la alusión irónica, en este caso no creo que se pueda hablar de "capitel protobizantino", dado que, con cierta frecuencia, se realizaron capiteles comparables desde, al menos, el siglo I.
En la cartela ofrecen una interpretación bastante detallada de los personajes representados, que aludiría a quienes financiaran los espectáculos públicos, acompañados, en los ángulos de victorias aladas; uno de los personajes podría ser el mismísimo emperador.
A juzgar por el tipo de acanto, que tímidamente se hace eco de las corrientes orientalizantes, podría tratarse, tal y como sugieren en la cartela, de un capitel del siglo IV o, incluso, un poco anterior.


Para finalizar

El museo arqueológico de Tréveris ofrece un recorrido por el pasado que, sorprende por cómo caló allí la romanización y desconcierta en cuanto a la escasez de restos atribuibles a las fases tardonatiguas y prerrománicas. El uso de interrogaciones en la catalogación de las piezas mencionadas es una magnífica expresión de una prudencia que no es fácil encontrar en otros lugares. Desde estas humildes páginas deseo transmitir mis felicitaciones a quienes han tomado una decisión tan cartesiana.
En todo caso, es desconcertante la pobreza de los restos de a primera época cristiana. El museo ofrece una importante colección de lápidas afines a las que aparecen en otros lugares (Francia, península Ibérica, etc.) pero no hay elementos de ornamentación arquitectónica que puedan relacionarse con las primeras iglesias. Y los restos atribuidos a los siglos VI y VII son francamente decepcionantes, sobre todo si se contemplan con la idea de que pudiera haber alguna relación entre los restos de esta zona y los de otras más al sur, que conocieron las aportaciones étnicas y culturales de los pueblos germánicos...


Piedra grabada procedente de San Matías y atribuida a los siglos VI-VII

Y me imagino la perplejidad de las autoridades culturales de Hitler cuando los arqueólogos hispanos se empeñaban en establecer vínculos entre los ancestros de unos y otros, al amparo de un "Estado Visigodo", que, ante todo, dejó a los alumnos de posguerra un reto memorístico que, a su vez, dio para mil chanzas, no siempre oportunas. Porque como dijo cierto e ilustre profesor de historia, proclive a usar el materialismo histórico como recurso científico básico, intentar el análisis de una época determinada sin tener claro el orden cronológico de los hechos acaecidos en ella es tan absurdo como pretender construir un muro con argamasa e ideas.
Y nadie deduzca que, con este comentario "epigonal", intento reivindicar que se siga torturando a los niños con retos memorísticos de ese tipo: la figura retórica implícita en el comentario va por otro camino...