Por despejar la mente de servidumbres forzadas, viajo a Colmenar de Oreja... Tenía pendiente dar un paseo por el museo Ulpiano Checa, inaugurado por doña Esperanza Aguirre Gil de Biedma el 9 de marzo de 2009, según dice la placa situada junto a la entrada. Entiendo que es buena idea crear museos como éste en poblaciones como Colmenar de Oreja, porque potencian y dinamizan las posibilidades turísticas y culturales. Así, pues, y sin que sirva de precedente, mi más fervoroso aplauso para una decisión que debería repetirse en toda la geografía de la comunidad madrileña. Se me ocurren varias ideas explosivas que no ofreceré públicamente por no dar ventaja a quienes viven del plagio... Prefiero divertirme comentando lo que se les ocurre a los demás....
En contrapartida, el tirón de orejas tiene por objeto a quienes se han empeñado en matizar la iniciativa con tintes ultra-provincianos enfatizando la "influencia" que, supuestamente, tuvieron las pinturas de Ulpiano Checa sobre algunas películas de temática afín. Como Ulpiano Checa realizó pinturas de temática "árabe", debemos creer que D. Lean se inspiró en ellas para realizar Lawrence de Arabia. Del mismo modo, Fred Niblo y William Wyler se habrían inspirado en sus obras para realizar las dos celebradas versiones de Ben-Hur. E. B. Schoedsack para Los últimos días de Pompeya. R. Scott para Gladiator y hasta S. Kubrick para Espartaco. Lo peor del caso no es el "ditirambismo" de ciertos hagiógrafos y otros plumíferos de alquiler, sino que en la organización museística hayan dado por buenas unas hipótesis que convierten la institución turístico-cultural en un monumento colosal al casticismo provinciano más rancio y añejo.
Más allá de los paralelos formales entre las pinturas de Ulpiano Checa y las películas mencionadas, imposibles de negar grosso modo, es preciso tener en cuenta que las imágenes del pintor colmenareño nos remiten a importantísimos precedentes, agrupados en dos fenómenos que debió conocer sobradamente y que siguen siendo referencias fundamentales para quien esté interesado en las costumbres del Imperio Romano:
a) Las tradiciones italianas, sensibles en casi todas las regiones con "escuelas" pictóricas importantes desde el siglo XV: Florencia, Roma, Venecia, etc. En la actualidad existe un Museo della civiltá romana, que, con criterios científicos, culmina esa tradición. Fue inaugurado en 1952. b)Las aportaciones "arqueológicas" (inicialmente con comillas y luego sin ellas) de los siglos XVIII y XIX, tan influyentes en las corrientes estéticas europeas del siglo XIX... y de tanto arraigo en Francia, Inglaterra y Alemania. El Instituto Arqueológico Alemán fue fundado en 1829; el interés académico francés por las antigüedades romanas viene de más lejos...
Y por el lado del cine, los datos aún son más testarudos. Cuando se rodó el Ben-Hur De William Wyler, ya existían muchos precedentes de escenas con carreras de carros... y, por supuesto, de ambientación "romana". Entre otras, Quo Vadis, de E. Guazzoni (1912), Los últimos días de Pompeya, de E. Rodolfi (1913), la monumental Cabiria, de Pastrones (1914)... Messalina, de Enrico Guazzoni (1923), Ben-Hur, de Fred Niblo (1925),
No me imagino a William Wyler, D. Lean o a S. Kubrick recurriendo a imágenes de Ulpiano Checa para preparar los vestuarios de sus respectivas películas, cuando era tan fácil acceder a precedentes cinematográficos tan notorios o a trabajos especializados respaldados por las instituciones académicas o museísticas italianas, francesas, inglesas y alemanas, especialmente. Con pretensiones más modestas, las obras de Ulpiano Checa se nos presentan en el contexto de una corriente estética que triunfó en los ambientes académicos de toda Europa entre finales del siglo XIX y principios del XX, y determina referencia obligada para las expresiones iconográficas posteriores, por supuesto, incluido el cine. Óscar Lapeña ofrece un interesante y, en ocasiones, discutible texto sobre el particular...
Por lo demás... Ulpiano Checa es un pintor académico que algunos comparan con Sorolla, Fortuny y Federico Madrazo... Dicen que las comparaciones son odiosas y, en este caso doy fe. En el museo podemos ver algunas "cosas" de cierto interés, pero sólo "de cierto interés"...
Si es lícito recurrir al formato lapidario (adecuado para compensar las consignas políticas que suelen formularse en las inauguraciones de museos), diré que, según mi criterio, Intentar convertir a un pintor de cierta calidad, pero de "segunda fila", en la quintaesencia de la genialidad carpetovetónica es una majadería.
No obstante, si el lector es incondicional en el respaldo a los corifeos de doña Esperanza Aguirre Gil de Biedma, le sugiero una aventura apasionante: encontrar los errores de ambientación y vestuario en las grandes películas "de romanos". Me consta que en el Espartaco de Man-Kubrick existen algunas "imprecisiones" en el vestuario militar... Si esas "imprecisiones" aparecieran también en las pinturas de Ulpiano Checa, sería terrible...
« l’art du cochon ».
ResponderEliminarEstimado señor, solo puedo felicitar su página abierta a la crítica en tal sociedad en el que cada vez más el arte y la cultura se hacen espectáculo, y en los que es difícil discernir « l’art du cochon ». Y es por que en ellos parece translucir sus preocupaciones hacia la sociedad, la creación y lo llamado arte, en general y en particular, que intento escribirle en su lengua, esperando acertar respecto a algunos juicios adquiridos durante la visita que recita, y de la que el artista en cuestión no es del todo responsable. Se trata de una selección subjetiva, vista desde el exterior, para quienes conocen más de mil obras del artista fuera de España ; y objetiva para ustedes los visitantes que únicamente se pueden ceñir a lo expuesto.
Este pintor tuvo que hacer todo hasta obtener sus títulos en Roma. - No era lo mismo para los pintores catalanes y vascos, con otras vías y medios- Y desde que pudo viajar en Italia comenzó su trabajo personal y de su tiempo, sin obligaciones académicas. Al tiempo de ser un dibujante prolífico.
Sus obras de esta época son poco o desconocidas en España y a mi entender, cambian la historia de la pintura de la España castellana, con él como pionero, de lo que no fue presentable hasta principios del S. XX, en España por pintores cercanos al post-impresionista.
Todo ello pasa inapercibido al sur de los Pirineos - excluida Cataluña y P.Vasco. Entre la defensa de los discípulos de la academia en el Prado y el salto al S XX del R. Sofia, la modernidad parece no haber existido.
Difficile d'être "moderne" dans l'Espagne d'Alphonse XIII, ha sido el título de la reciente exposición en Lausane.
Posteriormente se instaló definitivamente en Francia donde algunas de sus obras son monumento nacional del arte 1900.
Suelo tener ocasión de ir a ver sus obras monumentales por estar cercanas a mi residencia de Paris y cerca de uno de sus talleres en la capital francesa. Su representación de las ciudades de Monte-Carlo, Toulon, Arles et Montpellier, en el « Train Bleu » son muy apreciadas.
Comprendo la dificultad de conocer y comprender su obra sin poderla situar, en un movimiento 1900, que creo, tuvo poca influencia en la España, de la que le hablo. Es de esperar que las obras de los artistas de esa época pudiesen ser presentados en un museo tipo Musee d'Orsay.
Puede sea un dato importante saber que su marchante y defensor fue Ernest Gambard, o que el crítico que más defendió su obra fue Paul Martz, o que la galería donde realizó su primera exposición personal, con gran éxito y abarrotada de público, fue Georges Petit en París.
He podido visitar el museo San Telmo, reciéntente, tras su remodelación, en uno de mis viajes, y he constatado que han dejado expuestos algunos cuadros de ese fin del XIX en España, en un intento de representarlo, que creo exitoso. Creo recordar que han quedado alguna obra de Berruete, Sorolla y un carretero cargado de Ulpiano Checa “ Le fardier”. Este cuadro, de fin del XIX, con sus postes eléctricos y pinceladas lanzadas como manchas, es patente que el artista U.Checa no tiene ninguna preocupación clasicista, académica o historicista.
Su obra quedo comentada en el catálogo de Garmendi.
- mágenes de una España Romántica a una España de luz / Catálogo Museo San Telmo-1990
Saludos cordiales X. Etcheandia
« l’art du cochon »... suite I
ResponderEliminarRecuerdo hace una treintena de años, la falta de información que se encontraba al sur del Pirineo sobre la llamada escuela de París y sus pintores españoles. Los catálogos escasos, con obras sin repertoriar o desconocidas. Son pintores que hoy es un placer encontrar bien documentados, en museos españoles. Muchos de ellos habían realizado la mayor parte de su vida profesional en Francia y nuestras colecciones privadas fueron desvalijadas a favor de las españolas, gracias a la curiosidad, interés y economía que lo permitía.
Hoy, la economía no lo permite, pero pienso que el interés por esta época de finales del XIX surgirá en España como ha ocurrido en Francia. Y puede podrán descubrir a aquellos artistas que trabajaron en la República Francesa y menos conocidos al sur del Pirineo.
Puede también que resurja el interés por las obras sobre papel, ,acuarelas y las tintas, que suelen representar otro universo del artista, más íntimo y sincero, sin correcciones posibles en las tintas.
En todo caso para conocer a U. Checa sus dibujos e ilustraciones son indispensables.
http://www.museesbagneres.fr/ulpiano_checa_507.htm
Permita en cambio no interesarme al intenso debate que parecen tener sobre “La carrera de carros romanos 1890”. Tengo la impresión de que buscan en el suelo lo que se encuentra en el Sol que brilla o su contrario ; en la tempestad que llegó o/y que llega.
Llegó partiendo desde Africa. Ordas ocuparon Valladolid a partir de 1936 y en Avril, de 1939 tomo fuego la biblioteca universitaria y en su interior se quemaron bastantes obras depositadas y pertenecientes al Prado. Entre ellas « La invasión de los bárbaros » de Ulpiano Checa.
-Algo semejante representaba « La obra « La carrera de carros romanos » con sus caballos sufrientes relinchando, para otros espectadores y pintores como Rudolf Bauer, cuando decidió realizar una copia, que ha sido expuesta en su exposición de obras sobre papel en el Museum of Modern Art, New York.
Rudolf Bauer (1889–1953) : Römisches Wagenrennen von Ulpiano Checa |Exposition la plus complète des œuvres de Bauer sur le papier, Museum of Modern Art, New York, Works on Paper
http://www.weinstein.com/bauer/pdfs/bauer_wp-cat_txt.pdf
Entre esas invasiones, barbarie y carreras por el poder incapaces de resolver sus problemas sino con masacres, esas dos obras desaparecieron : entre 1936-45.
Y puede que ese «Irrintzi » del caballo de Checa y su grito de dolor, tenga algún sentido o fondo que cada espectador puede sentir o no sentir nada. (o también nos podemos poner una venda en los ojos, o en los... del alma como decía M. Hernandez y hablar plástica y estética)
La obra fue realizada por un recién salido de la academia de roma, que con utilizando las técnicas en las que era especialista, con una perspectiva de ojo de hormiga y de pez, situaba al espectador en medio de la arena. Los colores vivos lanzados con amplios movimientos de brazo entero, salían puros y pastosos de los tubos, al opuesto de las pinturas académicas presentadas en los salones, de los seguidores de David, o de los “pompiers”, el espectador en medio de la materia píctural y la “débacle”.
Pero creo Señor que la labor del crítico, del marchante, o del comisario expositivo, debería ser: señalar con el dedo lo que cree interesante y situado en espacio/tiempo, con fundamento!.
Saludos cordiales X. Etcheandia
« l’art du cochon »... suite II
ResponderEliminarLe dejo en compañía de algunos textos, disculpándome de mi mal castellano, y animándole a continuar como buen « amateur » en su real sentido de amar « el arte »
…en el dibujo es el juicio que habla al juicio, por el carácter eminentemente intelectual de la línea, en especial cuando es despojada, sin sombras que alteren la pureza de su discurso visual. Y en esa casi inmaterialidad del trazo es donde el artista inventa más. Por su formidable poder de abstracción, el dibujo está cerca del lenguaje, pero al mismo tiempo mantiene incólume su carga sensible al fin y al cabo es una materia que se extiende sobre una superficie afirmando su carácter concreto.
(Paul Valéry | Trad. Nelson Di Maggio)
Checa mostró voluntad para ejecutar y mostrar gran parte de su obra en papel. Fue maestro en sus ejecuciones y pionero en la organización de sus muestras y exposiciones personales en las que óleos, estudios, bocetos y obras únicas sobre papel eran mostradas conjuntamente. X.E
Degas decía : El dibujo no es la forma, sino la manera de ver la forma, y Leonardo nos recuerda que el secreto del arte de dibujar es descubrir en cada objeto la particular manera como una linea fluctuante se dirige, como una ola central que se despliega en olas superficiales, a través de toda su extensión.
Checa como Degas, encarna uno de los últimos representantes de aquellos artistas que alimentados de textos clásicos, herederos de una tradición artística marcada por el sello de una rigurosa disciplina, de cierta probidad intelectual y de una conciencia histórica, adhieren y comprometen tanto la inteligencia del “amateur” como la del artista.
Paul Valery nos habla de esta profundidad que llama tanto a la cultura, a la capacidad de juzgar, así como a un conocimiento real del sujeto sus deseos de universalidad que son la verdadera herencia del Renacimiento. Las economías de las facultades intelectuales, de la voluntad del artista de trascender por medio de la pintura y del dibujo que crean inquietudes en Valery.
Hoy, constata Valery, ya no es el tiempo en el que un artista piensa en perder el tiempo meditando, por ejemplo en los movimientos, las actitudes de hombres propios a mujeres, ancianos o niños anotándolos, antes de plasmarse y fijarse en la mente, en el espíritu. No digo que hoy no podamos pasar de ello. Pero digo que el “gran arte” no puede pasar de ello ,. Y digo que hay un “grand art”.
Saludos cordiales X. Etcheandia