lunes, 14 de octubre de 2013

Hirst, Vigeland, y “el milagro” de los negocios

Por Erc

“El artista británico Damien Hirst ha vuelto a maravillar al público con su obra escultórica”, proclamaba la prensa hace unos días. ¡Qué grandiosidad, qué idea, qué originalidad! Sí, evidentemente las 14 esculturas de bronce que ahora presiden el Sidra Medical and Research Center en Doha (Qatar) deben de impresionar, y mucho, debido a su escala monumental, pero nada más verlas a mí sólo me llegaban a la mente imágenes de las esculturas del noruego Gustav Vigeland en el parque de Oslo que lleva su nombre.

Foto Oli Hale. Damien Hirst and Science Ltd
Todo el mundo parece maravillado ante las estatuas de Hirst, las cuales representan el desarrollo del ser humano en el útero materno antes de su nacimiento, bajo el nombre de “El viaje milagroso”. Éste milagro por supuesto es un tema que sobrecoge, que es universal, que despierta todo tipo de emociones en nosotros, independientemente de nuestra cultura o procedencia. Desde luego, así me impactaron también a mí las obras de Vigeland en Oslo, en uno de los parques más hermosos que he visto nunca. En él se reúne prácticamente toda su obra, unas 192 esculturas con 650 figuras en granito o bronce. Además también ideó las verjas de hierro forjado.
El tema que da unidad a todo su trabajo es el ciclo de la vida, del nacimiento a la muerte. Vemos cada etapa, la relación del hombre con la mujer, el amor y su falta, el entusiasmo, la alegría de la juventud, el dolor, la pérdida, la tristeza. Todo ello tallado en cada uno de los gestos de sus hombres y mujeres de piedra solitarios o entrelazados. Sus obras parecen el legado de toda una cultura, con monolito incluido. Una de las zonas más importantes del parque es el puente, en el que las esculturas se disponen linealmente, como las de Hirst, cuya última concepción recuerda aún más especialmente a la zona llamada “La plaza de los niños”, con esculturas de bebés de bronce en diferentes posturas en torno a un feto de tamaño natural. En “El viaje milagroso” de Qatar, también el feto recién nacido se ha convertido en la pieza estrella…

Foto wystancarswell wordpress
Gustav Vigeland dedicó toda su vida a crear el inmenso legado que entregó tras su muerte a la ciudad de Oslo, legado que ahora todos tenemos la suerte de poder contemplar, pero que es muy desconocido para una gran mayoría. Lo que no sabemos es si quedará alguna huella de la mano de Damien Hirst en sus faraónicas creaciones, teniendo en cuenta las dificultades de producir durante tres años una serie de esculturas que pesan en su conjunto 216 toneladas y  que han costado 20 millones de dólares.
Lo que parece claro es que en este apretón de manos entre Hirst y Qatar todos salen ganando. El artista vuelve a recibir toda la atención que acostumbra, y no creo que los honorarios que haya percibido hayan sido especialmente bajos. Por su parte, H. E. Sheikha Al Mayassa Bint Hamad Al Thani, presidenta de la Autoridad de Museos de Qatar (y hermana del actual emir) ha declarado que  quieren “utilizar el arte contemporáneo para abrir las puertas de Qatar a la modernidad”. Así que quién mejor que Hirst para eso.
Y otra vez a preguntarnos todos cuánto hay de verdadero arte y cuánto de negocio únicamente en el mundo actual. Aunque en este último caso de Hirst no creo que haya que negociar mucho la respuesta.

5 comentarios:

  1. Esta alianza ya viene de lejos.
    http://www.tate.org.uk/about/press-office/press-releases/damien-hirst-0

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  2. no voy a discutir lo que es arte y lo que no, pero dudo que nadie se gaste 20 millones de dolares en esto y no quiera rentarlos, hasta ahí todos llegamos no?

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  3. Realmente el coste del nacimiento de estas criaturas, no va a llegar ni de lejos a los beneficios netos que le va a sacar. Más conociendo la comisión de Hirst en galerías que alcanza un 50% (algo extraño para un artista consagrado), vamos que su obra se divide a partes iguales entre el y sus mecenas, este dato me hace comprender los picos que genera Damián en el mercado.

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  4. fealdad y mediocridad bien concentrada.me pregunto si don hirst habra movido un dedo en la realizacion de esas esculturas o si como es ya costumbre se dedica a otras guerras.cuanta creatividad ,cuanta modernidad,

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