El Ayuntamiento de Málaga, gobernado por el PP, ha decidido incrementar el potencial museístico de la ciudad mediante un acuerdo con el Centro Popidou, que abrirá una sucursal en “El cubo”, un edificio ya existente y aún sin uso, en la zona comercial del puerto deportivo (cerca de la plaza de toros). El acuerdo es, en realidad, una especie de franquicia, por la que el Ayuntamiento abonará más de 2 millones de euros al año por usar el nombre y ofrecer un espacio expositivo con obras que complementen lo que ya ofrece la ciudad y, muy especialmente, el Museo Picasso. Los 2 millones resultarían de sumar un millón por explotación de “la marca” con los gastos de transporte, seguros y demás aspectos colaterales. Los partidos de la oposición (PSOE e IU) han cuestionado la iniciativa argumentando que ellos aplicarían otro orden de prioridades en el gasto…
Acaso no sea una iniciativa interesante desde el punto de vista de la divulgación cultural o de las infraestructuras educativas, pero aunque sea difícil evaluar su rendimiento a corto plazo, sin duda es un buen reclamo turístico para un público cada vez más interesado por el arte contemporáneo.
¿Dos millones al año es una cifra excesiva? Todo el mundo sabe que el arte no tiene precio...
Acaso no sea una iniciativa interesante desde el punto de vista de la divulgación cultural o de las infraestructuras educativas, pero aunque sea difícil evaluar su rendimiento a corto plazo, sin duda es un buen reclamo turístico para un público cada vez más interesado por el arte contemporáneo.
¿Dos millones al año es una cifra excesiva? Todo el mundo sabe que el arte no tiene precio...
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